Por Huemanzin Iyolocuauhtli
Una exposición que cuenta la construcción de la Ringstrasse, o calle del anillo, ha sido inaugurada en la Biblioteca de México. El 1857 el Emperador Franz Joseph mandó a derribar el muro medieval que protegía a la ciudad de Viena. Este hecho significó un cambio radical de la capital del imperio que se convirtió en la otra ciudad luz del siglo XIX. En lo que fue el muro se construyó un boulevard, metáfora del presente y futuro del imperio.
Susanne Hammer, agregada Cultural de la Embajada de Austria en Mexico señaló que “la Ringstrasse es un boulevard en nuestra capital Viena, de una época muy difícil. Muy difícil para Europa porque había muchos cambios en todos los países”.
El emperador quería una capital moderna, y aunque inspirado en París, la Ringstrasse se convirtió en un boulevard diferente pues no llevaba a ningún edificio de gobierno o a una escultura militar. Junto con el anillo comenzó un desarrollo urbano en el más amplio sentido.
“Contiene varios edificios, museos, parques, también edificios administrativos y para esa decisión el emperador abre la ciudad a la gente. Y cambia, fundamentalmente, todo el estilo de la ciudad” refirió Hammer. La ciudad luz del siglo XIX era Viena donde estuvieron los pensadores, pintores, escritores, el humanismo. De manera curiosa eso acompañó el inicio de la caída del imperio.
“Justamente permite conocer que también en Viena había esa gran tradición de artistas, como Gustav Klimt, de escritores, de músicos. Y también una gran intelectualidad y un espíritu de Revolución” expresó Hammer.
El fuerte, que fue esencial en la victoria durante el sitio otomano de 1683, permitió avenidas largas y anchas. Entonces el emperador, temeroso de su corona y suspicaz de su familia y colaboradores, mantuvo con líneas rectas la Ringstrasse, para observar mejor cualquier tipo de movimiento. Esta exposición se inserta en otras actividades que la Embajada de Austria en México tiene con la Biblioteca de México.
La representante cultural de la embajada de Austria puntualizó que mantiene una cooperación con la biblioteca, “tenemos también una pequeña biblioteca de libros austriacos que la embajada presta a la biblioteca, que son accesibles al público”.
La exposición El nacimiento de la arquitectura vienesa moderna. 150 años de la Ringstrasse estará abierta al público todo el mes de mayo.