México, 11 jul (PL) Restos intactos y casi completos de un perezoso de Shasta (Nothrotheriops shastensisen) fueron hallados en un cenote o cavidad con agua en Tulum, en el sureño estado mexicano de Quintana Roo, se reportó hoy aquí.
Según dio a conocer el espeleólogo y buzo Vicente Fito Dahne este hallazgo se suma a más de 20 descubrimientos prehistóricos, lo que demuestra que el municipio es un asentamiento cuyo origen se remonta a casi 13 mil años.
El cráneo y el esqueleto se encontraron a 55 metros de profundidad y a 100 hacia adentro de la cavidad, mientras se presume que tiene una antigüedad de entre ocho y 10 mil años.
Se trata de la colección de esqueletos más grande de la era del hielo en América, además de que de acuerdo con los entierros la actividad humana estuvo a cientos de metros dentro de las cuevas, explicó.
Este especialista estuvo acompañado por el alemán Dirk Penzel, también buzo y explorador profesional, quien coincidió en que «es el primer cráneo de esa especie hallado en la Península de Yucatán y el segundo descubrimiento de perezoso, pero de diferentes especies».
La citada península está integrada por los estados mexicanos de Yucatán, Quintana Roo y Campeche.
En opinión de los exploradores, el perezoso de Shasta, que adopta este nombre de un parque natural de California, es una de al menos dos especies de notroterio (parecido al oso hormiguero) de los que se han encontrado fósiles desde México hasta Canadá.
Dicho mamífero pesaba alrededor de un cuarto de tonelada y medía poco más de un metro de altura, de tamaño intermedio entre los osos gris y negro actuales, con pelaje amarillo pálido menos abundante que el de las otras especies de perezosos.