Elena Garro desobedeció a su padre y se casó con Octavio Paz, exiliándose de su proyecto intelectual y entrando al mundo del machismo.
Garro vislumbró la injusticia que padecían las niñas y adolescentes pobres de México.
(N22) El asesinato de Elena Garro. Periodismo a través de una perspectiva biográfica (UANL, 2014) reúne la obra periodística de Elena Garro, misma que es conformada con datos biográficos, parte fundamental para un acercamiento al periodismo realizado por la autora mexicana. El titulo se refiere a cómo las mujeres pierden su lugar, su voz y su talento queda al margen a causa del machismo desarrollado dentro de una sociedad patriarcal.
El nombre de Elena Garro va ligado, casi siempre, al de Octavio Paz. Fue a finales de la década de los 30 del siglo XX cuando contraen matrimonio y al mismo tiempo ella es limitada en sus aspiraciones intelectuales. Fue por el mismo poeta que comenzó en el periodismo ya que al casarse, la pareja padeció problemas económicos fuertes que sólo pudieron ser superados por los ingresos de la periodista.
Las primeras colaboraciones de Garro tratan sobre la condición femenina. No es una casualidad que sea éste el tema dentro de la pluma de la periodista, las condiciones sociales de esa época y lo que ella estaba viviendo en carne propia con Paz fueron pilares para evocar el tema, para señalar la opresión a las que son sometidas las mujeres.
Y es que Garro, alumna brillante con grandes aspiraciones, desobedece a su padre José Antonio Garro y se casa con Paz, exiliándose de su proyecto intelectual y entrando al mundo del machismo, al que ingresó bajo la sombra del poeta. Es gracias a Elena Garro que su esposo consiguió empleo de diplomático cuando se acabó la Beca Guggenheim, de la Universidad de California, Berkeley, que también consiguió con su ayuda. Fue ella la principal columna económica de la familia Paz – Garro.
Con el nacimiento de la hija de la pareja, Helena Paz Garro, la periodista fue manipulada a través de ella que buscaba el divorcio. Sin embargo, su esposo no cedió pese a que las leyes beneficiarían a la madre en caso del divorcio, pero los mandamientos culturales la pondrían en desventaja. Y como ella misma lo señaló: “Debes saber que mi padre era sólo un inmigrante español, sin INFLUENCIAS y que Paz pertenecía a una familia de políticos, y que México siempre fue México”.
Asimismo, las colaboraciones periodísticas de Garro en la revista Así fueron críticas al sistema político corrupto de su época (lo mismo sería al de ahora), con su reportaje sobre la cárcel para mujeres y su activismo en defensa de los campesinos despojados de sus tierras. Su primera entrevista fue con la cantante de ópera Lolita González de Reachi, después con la pintora Frida Kahlo y la actriz Isabella Corona.
Mujeres perdidas (1941) fue el reportaje que se dio a conocer en cinco entregas, donde la periodista escribió la terrorífica crónica de lo que sucedía al interior de la Casa de Orientación para Mujeres, ubicada en Coyoacán. Garro vislumbró la injusticia que padecían las niñas y adolescentes pobres de México.
Garro hizo este reportaje desde dentro del penal, entró como prisionera y desde ahí señaló los castigos brutales que se cometían en contra de las reclusas. Su testimonio sirvió para darle fama y prestigio como periodista y para hacer justicia: la directora del penal fue cesada de su cargo por los abusos cometidos en contra de las prisioneras.
El libro de Rosas Lopátegui, El asesinato de Elena Garro. Periodismo a través de una perspectiva biográfica (UANL, 2014), reconstruye esta época de la vida de la autora e incluye sus colaboraciones periodísticas en su capítulo primero.