En los últimos cuatro meses, al menos 20 mujeres migrantes alojadas en el refugio “La 72”, en Tenosique, Tabasco, fueron violadas sexualmente al cruzar la frontera hacia México, y aunque denunciaron penalmente no ha habido alguna consignación.
Fray Tomás González Castillo, coordinador del refugio para migrantes “La 72”, aseguró en entrevista telefónica que hay un repunte de la violencia contra las personas en tránsito irregular por el sureño estado de Tabasco.
Las agresiones –señaló– van desde robo y extorsiones hasta secuestros masivos y violación sexual, este último delito documentado al menos contra 20 mujeres que llegaron al refugio en busca de apoyo.
El activista informó que los ataques se empezaron a registrar con más frecuencia desde agosto pasado, repuntaron en septiembre y el pasado 20 de noviembre documentaron el ataque más reciente contra una joven de 18 años que llegó junto con un grupo de varones que fueron asaltados.
A decir de Tomás González, 18 víctimas presentaron denuncias penales –irresueltas hasta ahora– ante la Procuraduría General de la República (PGR) y la Fiscalía Especializada en delitos contra migrantes del estado de Tabasco, una de las siete que hay en todo el país.
Explicó que las autoridades ya cuentan con elementos suficientes para detener a los criminales, los cuales –según las similitudes entre los casos– forman parte de un grupo de tres o cuatro hombres “bastante violentos” que atacan por la madrugada a las mujeres durante su tránsito por la comunidad de Río Grande, en Tabasco.
Las agresiones –precisó fray Tomás– han sido incluso contra personas transexuales y menores de edad, quienes, como todas las víctimas, son atendidas médicamente en “La 72”, donde se les brindan pastillas de anticoncepción de emergencia para que no presenten embarazos, e inyecciones para evitar infecciones de transmisión sexual.
En contraste, el médico legista de la PGR revisa a las víctimas durante 20 minutos, se inician las averiguaciones previas y luego las autoridades se olvidan de los casos, denunció el defensor de la población migrante.
Al menos dos de las mujeres que fueron atacadas sexualmente también fueron privadas de su libertad, se les obligó a dar los números telefónicos de sus familiares para extorsionarlos y tras pagar mil 500 dólares (25 mil 320 pesos mexicanos) fueron puestas en libertad.
Fray Tomás González dijo que esta práctica y los testimonios de las víctimas evidencian la existencia de una red para el secuestro masivo de personas migrantes –en la que presuntamente estarían implicadas autoridades federales y municipales–, que opera con total impunidad en Cárdenas, Tabasco, y Coatzacoalcos, Veracruz.
A la par, el personal de “La 72” también ha sido extorsionado, perseguido por el crimen organizado y amenazado de muerte en al menos dos ocasiones; una de ellas el pasado 14 de noviembre, relató el activista.
El defensor exigió a las autoridades federales, estatales y municipales que intervengan de manera urgente en la zona, y pongan un alto a los ataques criminales, al mismo tiempo que el Estado mexicano garantice a la población migrante su derecho a la protección internacional como víctimas del delito.
Fuente: Cimacnoticias