Angela Merkel rechaza planes migratorios con Austria

Roma, 5 may (PL) La canciller federal alemana, Angela Merkel, y el primer ministro italiano, Matteo Renzi, fustigaron hoy las intenciones de Austria de construir una valla de contención migratoria en sus límites fronterizos, indicaron medios locales.
«Europa debe demostrar que es una fuerza válida en el mundo. De lo contrario se corre el riesgo de volver a caer en los nacionalismos, está en juego el futuro de Europa», advirtió Merkel sobre las individualidades en el seno de la Unión Europea (UE) frente a la crisis de migrantes y refugiados.
Además, la política alemana abundó también en el hecho de que como mismo se lograron cambios esperanzadores en el euro, la moneda que impera en la UE, se debe trabajar de manera conjunta en la defesa de la zona de libre tránsito Schengen y las regulaciones aplicadas en cada una de las fronteras exteriores, dijo.
Merkel instó también a los gobiernos europeos a «respetar la dignidad de las personas» y buscar una manera equitativa dentro de los 28 estados miembros de la UE para «repartir la carga» en materia de migración, algo que -a su entender- una valla de 400 metros en la frontera Austria-Italia amenaza de manera perenne.
Tampoco dudó en afirmar que aunque Italia y Alemania tengan «ideas distintas sobre los instrumentos de financiación», comparte las últimas propuestas de Roma en la cuestión migratoria.
En la misma tónica, Renzi sostuvo que la idea de Austria de construir una valla en Brennero (límite natural entre ambas naciones) es «una posición equivocada, anacrónica y no justificada por ninguna emergencia», expresó.
Según el mandatario italiano, la drástica medida no tendría basamento legal alguno, pues no existe ningún tipo de crisis en estos momentos, teniendo en cuenta que en 2015 recibió 26 mil migrantes, solo mil más que en 2014, acorde a cifras citadas por él mismo.
«Brennero es mucho más que una frontera, es un símbolo. La postura de Austria respecto a la inmigración va contra la lógica y contra la historia», agregó Renzi sobre la tensa situación entre ambas naciones.
Por último, Renzi abundó en «la necesidad de tener un enfoque respecto a la inmigración cargado de valores humanos, de dignidad, para ofrecer una propuesta política como UE que sea seria, creíble y de largo plazo», concluyó.

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