Brasilia, 10 feb (PL) Al menos 121 muertos causó hasta el momento la ola de violencia que desde el sábado azota al estado de Espirito Santo, en el sudeste de Brasil, informaron hoy medios locales.
El chispazo inicial de la crisis lo propició la huelga de la policía militar en protesta por la falta de inversión en materia de seguridad y mejores condiciones salariales.
En solidaridad con los amotinados y para apoyar el pedido de sus reformas, familiares acampan desde hace casi una semana en las puertas de los cuarteles e impiden la salida de los agentes.
La ausencia de las patrullas y el casi nulo trabajo de seguridad en las calles allanan el camino de la ola de violencia matizada por el creciente número de muertos, saqueos y un incremento de los robos en los últimos días, señaló el sindicato de ese cuerpo armado en Espírito Santo.
El desafuero impera en el estado pese a la presencia del Ejército y la Fuerza Nacional de Seguridad, un cuerpo de élite de la policía brasileña, los cuales fueron activados ante la paralización de los agentes.
Tras las fracasadas negociaciones entre el Gobierno y los policías militares, el Ejecutivo estadual endureció su postura y presentó cargos contra unos 700 agentes por delito de ‘revuelta’, cuya pena puede llegar a los 20 años de prisión.
Comenzamos ya el proceso de responsabilidad, tanto en el aspecto criminal como militar, declaró el secretario regional de Seguridad Pública de Espírito Santo, André Garcia.
Otros brotes de protestas pudieran ocurrir en ciudades como Río de Janeiro o Belém, en tanto otros estados del gigante sudamericano apretaron el botón de sus alarmas ante el temor de nuevos paros.
Las primeras manifestaciones en las puertas de los batallones de la Cuidad Maravillosa comenzaron alrededor de la media noche anterior y son muchos los familiares que se mantienen de turno para impedir la salida de los policías.
Sin embargo, la mayoría de los agentes se desplegaron normalmente por Rio, pero en un grupo de estaciones, esposas de los guardias obstaculizaban la entrada principal.
Al menos 121 muertos por violencia en Brasil
