Damasco, 15 ago (PL) Lograr seguridad alimentaria nacional es hoy un objetivo estratégico para el gobierno sirio en medio del actual conflicto, aseguró el primer ministro Wael al-Halaki, quien además advirtió sobre enérgicas medidas contra la especulación monetaria y manipulación de precios.
Al reunirse el miércoles en esta capital con representantes de los organismos afiliados a los ministerios de Comercio Interior y Protección al Consumidor y de Economía y Comercio Exterior, el jefe de gobierno explicó que el país dispone de una reserva importante de alimentos, derivados del petróleo y suministros médicos.
Alertó que quienes incurran en actos de corrupción o atenten contra la estabilidad de la economía se hará rendir cuentas ante la justicia.
En julio, la Asamblea del Pueblo (Parlamento) modificó varios artículos de la Ley No. 24 de 2006, con el fin de regular las operaciones de manipulación en el mercado de cambios y activar el control sobre el mismo.
La legislación estipula condenas de tres a 10 años de prisión para los vendedores ilegales de divisas, además de multas cuyo monto será el triple del dinero recaudado en las operaciones ilícitas detectadas.
En el encuentro se analizaron los distintos proyectos de ambos ministerios para encarar la actual crisis económica mediante nuevos mecanismos ejecutivos que estimulen un mayor rendimiento y productividad dirigidos a satisfacer las necesidades del mercado interno, comentó la prensa nacional.
Al-Halaki subrayó que la nación está sometida a una agresión militar, económica, mediática y política que pretende socavar la estructura del Estado y quebrar la unidad de la ciudadanía.
Los enemigos de Siria iniciaron sus ataques contra nuestro pueblo a través de un injusto y arbitrario bloqueo económico y la destrucción de la infraestructura económica nacional para golpear los servicios públicos e intentar desestabilizar la economía, argumentó.
A su juicio, ello ocurre luego de comprobar el fracaso de los grupos opositores armados y radicales islámicos para imponerse en el terreno ante el avance ofensivo del Ejército Árabe Sirio.
El primer ministro orientó avanzar en la instalación de molinos pequeños móviles en las provincias para la producción de harina de trigo, de forma similar a la experiencia con las estaciones de butano que han permitido incrementar la disponibilidad de combustible doméstico, destacó la fuente.
En este sentido, el alto dirigente encargó al Banco Central de Siria y al Banco Comercial eliminar las dificultades burocráticas para importar grandes cantidades de trigo, además del aseguramiento de los medios de transporte para su traslado.