Pretoria, 2 mar (PL) Oscar Pistorius se enfrentará a la ley a partir de este lunes 3 de marzo en un juicio que será televisado en vivo y directo, con componentes de reality show y una gran cuota de especulación policial o mediática.
El primer velocista sin piernas de la historia olímpica está acusado del asesinato premeditado de su novia Reeva Rebecca Steenkamp, una rubia modelo de pasarela y televisión que tenía 30 años al fallecer con tres balazos en su cuerpo.
La cuestión principal que analizará el Tribunal Superior de Justicia del Norte de Gauteng es si se trata de un homicidio calculado o una muerte accidental. En la peor variante, Pistorius podría ser sentenciado a 25 años de cárcel.
El deportista sudafricano alega que disparó contra la mujer en la madrugada del 14 de febrero de 2013 porque la confundió con un ladrón intruso en su residencia. Pero ante tal argumento el nivel de suspicacia de los fiscales es alto.
Expertos legales adelantan que la evidencia forense jugará un papel preponderante en el proceso penal, para el cual 300 medios de prensa del mundo han solicitado permiso de transmisión y contacto con el centenar de testigos.
Un expediente presentado por peritos explica de manera exhaustiva el posicionamiento preciso del arma de fuego usada, la cadencia de los disparos despedidos, el nivel de luz en la habitación y la separación de los impactos, entre otros detalles.
Decenas de cadenas de televisión ya establecieron un perímetro de cobertura en las cercanías del Tribunal de Gauteng. Desde este domingo calles y plazas de aparcamiento se reservarán solamente para reporteros o funcionarios judiciales.
Los fiscales aseguran que en realidad el Día de San Valentín de 2013 Oscar Pistorius entró en un ataque de ira y celos y le pegó un balazo en la cabeza a su novia. Después le propinó otros dos en el codo y la cadera para justificar la coartada.
Lo cierto es que los éxitos deportivos del atleta de 27 años ya son cosas del pasado. Ahora se enfrenta a su más difícil carrera: maratón, con obstáculos y un fuerte viento en contra.
Quizás un punto a favor de Pistorius fue un nuevo video difundido por Sky News la semana anterior donde se observa a la pareja sonriente y besándose en un mercado de la cadena Woolworths, en Pretoria, 10 días antes del drama fatal.
Un punto en contra son declaraciones recientes de guardias de seguridad en el vecindario del corredor. Cuando los cuidadores preguntaron que había sucedido -tras escuchar disparos- Pistorius respondió «tranquilos, todo está bien».
Un total de 107 testigos han sido llamados a declarar en el procedimiento penal, entre ellos la hermana del acusado, Aimee, su tío Arnold, varios Investigadores policiales y vecinos del reparto Woods Country Estate, donde reside el reo.
Paramédicos, expertos en balística, y hasta un meteorólogo están también en la lista de convocados por el juez. Sin embargo, la mayor atención estará en los testimonios de las exnovias de Pistorius, Melissa Rom y Samantha Taylor.
Se ha dicho que el atleta paralímpico, con ambas piernas amputadas desde los 11 meses de edad, tiene mal carácter, tendencia a la agresividad y a las reacciones emocionales desproporcionadas.
El exfutbolista Mark Bachelor afirma que en una ocasión Pistorius amenazó con destrozarle las dos rodillas después de una simple disputa verbal.
Otros testigos indican que lo vieron disparar una pistola dentro de un restaurante lleno de parroquianos ubicado en Melrose Arch, Johannesburgo.
Trascendió que el consorcio estadounidense Apple podría ayudar a los fiscales sudafricanos. Según el velocista, se le olvidó la contraseña de su celular iPhone, y autoridades creen que ese teléfono podría contener las pruebas contundentes que cierren definitivamente este caso.
Oscar Pistorius, en su época de oro conocido como Blade Runner, ganó fama mundial en las Olimpiadas de Londres 2012. Para correr usa prótesis de fibra de carbono inventadas por el ingeniero biomédico Van Phillips y fabricadas en Islandia.