Hanoi, 14 may (PL) La iniciativa Global de Naciones Unidas contra el Tráfico de Personas (UN-ACT) presentó hoy aquí un proyecto de cinco años de enfrentamiento a esta violación de derechos humanos en la región del Sudeste Asiático.
En un documento difundido se señala que la región del Asia-Pacífico es la que muestra las más altas tasas de semejante trasiego.
A su vez la Organización Internacional del Trabajo (OIT) de los casi 21 millones de víctimas globales de labores forzadas, más de un 50 por ciento se encuentran en esta parte del mundo.
Añade que el tráfico en el área incluye fines de explotación sexual, matrimonios impuestos y mendicidad callejera.
Se consigna que para Vietnam también constituye un problema que enfrenta mediante un plan nacional de acción, respaldado por legislaciones y convenciones internacionales para perseguir a traficantes y prevenir que el país se convierta en destino y tránsito del comercio humano.
Autoridades reconocen, sin embargo, que persiste ese desafió a través de las fronteras y desde 2005 se han procesado más de tres mil casos, con alrededor de cinco mil trasegadores que involucraron a unos seis mil 200 víctimas de engaño y explotación.
La UN-ACT se propone trabajar estrechamente con gobiernos, sociedad civil, académicos y entidades investigadoras para fortalecer la política de respuesta al tráfico humano en la subregión del Gran Mekong, y más allá.
Al presentar el proyecto, la coordinadora residente de la ONU en Vietnam Pratibha Mehta, puso énfasis en un asunto de enorme preocupación, por lo que implica de explotación a personas vulnerables y una forma de moderna esclavitud.