Por Huemanzin Iyolocuauhtli
Toda memoria es una reconstrucción, se trata de poner en su lugar esos momentos tal y como los recordamos y armar un rompecabezas que tenga sentido. A veces esos recuerdos son como las obras de arte, escamas de una piel antigua que necesitamos perder para renovarnos. Pero, ¿cómo hablar de uno mismo cuando esos objetos, llaves para abrir otra época, desaparecen? Así nace la exposición Lecturas del pasado: A través de objetos que pertenecieron a otros que reúne 45 cajas creadas por la artista Marcela Lobo.
“Yo perdí todo lo que tenía en Cancún, con el huracán Gilberto, se cayó mi casa. De pronto me quedé sin pasado. Esto es realmente un diario de mi vida donde cuento desde mi infancia, mi adolescencia, mi edad adulta y cosas que para mí son interesantes en mi vida. Es como recuperar el pasado” señaló Marcela Lobo.
Al perder sus objetos Marcela indagó por lugares para reconocerse entre las antigüedades. Apropiándose de esos objetos. Recordó que los ha comprado en mercados de viejo, “soy chacharera y coleccionista. Empecé a juntar cosas pero cuando decidí montar esta exposición empecé a buscar objetos más definidos para la caja que hacía en ese momento”.
“Esta vez quise plasmarlos en tercera dimensión y que la gente conozca mí historia y que a través de estas cajas la gente construya su historia, porque estoy segura que mucha gente se va a identificar” agregó la artista plástica.
Las cajas están agrupadas en distintas series cuyos títulos muestran con claridad la nostalgia de una época: Inocencia perdida, El tiempo pasa, Los años felices, Me casé tres veces, Las ilusiones rotas, ¿Quién soy?, No hay marcha atrás, El hijo que no llegó, entre otras.
Refirió que aunque esos objetos no sean de ella y sean de otra persona, esos objetos también están contando su historia. “Sí, encontré mi pasado; lo plasmé, alcancé a llegar hasta la época en la que estoy ahora y finalmente, el pasado es importantísimo porque gracias a él uno es lo que es hoy”.
La muestra Lecturas del pasado: A través de objetos que pertenecieron a otros se presenta en la Galería Juan Soriano del Centro Nacional de las Artes hasta el 12 de julio.