A tiro de piedra: El pacto por Quintana Roo

No preguntemos si estamos plenamente de acuerdo,
sino tan sólo si marchamos por el mismo camino
Goethe

Por: Julian Santiesteban

Luego de las elecciones del 05 de junio, la disputa entre los políticos parece centrarse en la descalificación del contrario para el mejor acomodo, situación que no se limita al gabinete, sino también a poderes como el Legislativo, en el que la Gran Comisión es la presea a obtener, pero el Partido Acción Nacional (PAN) acaba de frenar de tajo ese “canibalismo”, al proponer la firma de un pacto entre todas las fracciones parlamentarias, para que por primera vez en la historia local, los diputados se comprometan en sus labores a anteponer el interés ciudadano.

Fernando Zelaya Espinosa, diputado panista electo, fue el encargado de dar a conocer la medida, “jugada” interesante porque rompe con la dinámica de todos los que serán legisladores a partir del 03 de septiembre próximo, pues desde que los resultados electorales se dieron a conocer se han difundido todo tipo de declaraciones, desde aquellas en las que se dan a conocer los coordinadores parlamentarios, hasta los que aseguran trabajar para la entidad, pero en realidad se preparan para la guerra.

El señalado diputado, que parece será el próximo presidente de la Gran Comisión, dio justo en el blanco al proponer la firma de un documento en el que los 25 legisladores en lo individual se comprometan a impulsar el desarrollo estatal, a aprobar presupuestos en tiempo y forma, a mantener las comisiones legislativas trabajando y que no haya estancamiento, atender las demandas ciudadanas y ser una instancia de puertas abiertas; “nunca más vallas o puertas cerradas”, dijo.

Justamente lo anterior pone de relevancia el cambio de visión del Poder Legislativo y da muestras esperanzadoras de lo que pudiera venir; y con la firma que se espera de los diputados (su negativa sólo los evidenciaría como camarillas de poder) la gobernabilidad estaría garantizada en la etapa inicial del gobierno de Carlos Joaquín González, quien por cierto ha respaldado plenamente la iniciativa panista anunciada por Zelaya Espinosa.

En la víspera de la toma de protesta de los diputados, el PAN ha tenido el tino de enfilar los ánimos hacia un proceso constructivo y de propuestas que en mucho pudiera allanar el camino inicial de la XV Legislatura local, y es justamente lo que se necesita: concordia y no discordia.

Habrá que esperar entonces a la firma del documento, pero sobre todo conocer la reacción de los restantes 24 diputados locales a la iniciativa de Zelaya Espinosa; pues la misma tiene el impulso del gobernador electo, y debe entonces entenderse como una “mano extendida” para un buen gobierno, esperemos entonces el “estrechón de manos”; así se observa desde aquí, A Tiro de Piedra. Sígame en Twitter @julianisaac77

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