Naciones Unidas, 16 mar(PL) El representante permanente de Siria ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Bashar Al-Jaafari, denunció la manipulación e injerencia de potencias occidentales, que utilizan el Consejo de Seguridad para su conveniencia.
Los grupos terroristas armados siguen recibiendo ayuda del exterior y usan a los civiles como escudos humanos, los atacan con misiles y no les permiten salir de las poblaciones, expuso en el órgano de 15 miembros.
Mientras el gobierno de Damasco, debe asumir una gran responsabilidad para aplicar la resolución 2401, sobre una tregua con motivos humanitarios, los organismos de ONU hacen muy poco por aliviar el sufrimiento de decenas de miles que intentan huir del terrorismo, criticó.
En tanto, añadió el diplomático, algunos países miembros del Consejo de Seguridad utilizan de forma indebida ese organismo para difamar al gobierno sirio, señaló.
También se refirió a las prácticas de Estados Unidos y sus aliados del Golfo: sería bueno si a este Consejo pudieron venir las víctimas de tales acciones y revelar cómo les decomisan las entregas humanitarias, y luego las venden.
Ciertas potencias occidentales dicen sentirse muy preocupados por el sufrimiento del pueblo sirio, cuando son precisamente ellas las que invierten y financian el terrorismo, como ya hicieron en Yemen, apuntó Bashar Al-Jaafari.
A su consideración, hace falta una solución política a este conflicto por medio de un diálogo intrasirio, sin condiciones previas y sin interferencia extranjera.
En otras ocasiones, he informado al Consejo de Seguridad, sobre las medidas del gobierno encaminadas a aliviar el sufrimiento del pueblo, y acabar con los actos de grupos terroristas, recordó.
Ahora, agregó, acaban de establecer un nuevo corredor humanitario en Ghouta Oriental, con el fin de contribuir a la evacuación de civiles, asegurarles un transporte y un albergue seguro.
Del mismo modo, las autoridades sirias hacen todo lo posible, por garantizar las entradas de los cargamentos humanitarios de Naciones Unidas, recalcó.
Este 2018 se cumplen ocho años del conflicto en Siria, que estalló en buena medida como resultado del interés de Occidente y sus aliados regionales, de imponer un cambio de régimen en Damasco.
pgh/ifb