Washington, 10 oct (PL) El gobernador del estado norteamericano de Florida, Rick Scott, advirtió hoy que se acabó el tiempo para evacuar de forma segura a lo largo de la costa, donde se siente el impacto del huracán Michael.
El tiempo para evacuar a lo largo de la costa vino y se fue. Los socorristas no podrán salir en medio de la tormenta. Si elige permanecer en una zona de evacuación, debe buscar refugio inmediatamente, alertó en Twitter mientras se acerca el meteoro de categoría cuatro en la escala Saffir-Simpson de un máximo de cinco.
Durante una sesión informativa realizada después Scott reiteró que «la tormenta está aquí» y no es seguro viajar a través de la región del Panhandle de Florida.
Recomendaciones
Si se encuentra en una zona costera, no salga de su casa. La hora de evacuar en las zonas costeras ya pasó, remarcó el gobernante estatal, quien dijo que hay 54 refugios abiertos en toda el área y se contará con más según las necesidades.
A lo largo de nuestra costa las comunidades van a ver una devastación inimaginable, el Panhandle y Big Bend recibirán vientos de más de 145 millas por hora (230 kilómetros por hora). Se pronostica que el huracán Michael será la tormenta más destructiva que haya golpeado el Panhandle en un siglo, señaló.
De acuerdo con el último reporte sobre el organismo ciclónico, a las 08:00, hora local de esta capital el huracán tenía vientos máximos sostenidos de 230 kilómetros por hora y se encontraba a 145 kilómetros al suroeste de Panama City, y a igual distancia al oeste suroeste de Apalachicola, ambas localidades en Florida.
En las últimas 24 horas Michael se intensificó rápidamente al incrementar la velocidad de sus vientos en 70 kilómetros por hora, y según el Centro Nacional de Huracanes, podría fortalecerse aún más antes de tocar tierra esta tarde.
Solo en el lapso de 60 minutos, desde las 07:00 hasta las 08:00 de este miércoles, los vientos máximos sostenidos de la tormenta aumentaron en ocho kilómetros por hora.
Imágenes difundidas por el Servicio Meteorológico Nacional de Tallahassee, la capital de Florida, muestran una marejada de tormenta que ya afecta Rock Landing, cerca de Panacea, y el complejo turístico de Sandestin.
Además de en ese estado, otros dos territorios que serán impactados por el organismo, Alabama y Georgia, declararon estados de emergencia y emitieron órdenes de evacuación.