Washington, 24 ene (Prensa Latina) Los republicanos del Senado estadounidense continúan sin cambiar sus criterios sobre el juicio político contra el presidente Donald Trump, pese a los argumentos expuestos por los demócratas, según declararon hoy miembros de la fuerza roja.
Este jueves, en la segunda de tres jornadas en las que los congresistas demócratas que se desempeñan como fiscales realizan sus alegatos para tratar de convencer a los miembros de la Cámara Alta de que el mandatario debe ser removido de su cargo, la senadora Joni Ernst afirmó que esas presentaciones no los están convenciendo.
Realmente no están cambiando nuestra opinión, declaró la legisladora a la prensa, y añadió que los republicanos todavía están esperando «ver la evidencia abrumadora», para una vez que estén frente a algo como eso, tal vez convencerse de que se necesita más información o no.
Ernst criticó que los demócratas están repitiendo los mismos argumentos una y otra vez, luego de que los fiscales se han dedicado a exponer toda la evidencia recopilada contra el mandatario en la investigación que tuvo lugar en la Cámara de Representantes.
Trump fue acusado por ese órgano de mayoría demócrata de abuso de poder y obstrucción al Congreso por sus llamados a que Ucrania abriera una indagación sobre las elecciones norteamericanas de 2016 y otra sobre el exvicemandatario y precandidato presidencial demócrata Joe Biden.
A partir de documentos sobre el tema y del testimonio de testigos, la fuerza azul considera que el gobernante presionó a Kiev para que lanzara esas pesquisas con el fin de beneficiarse políticamente en los comicios de noviembre venidero.
En la presentación de sus alegatos, los fiscales reprodujeron decenas de clips de video de testigos que sugirieron en audiencias públicas que hubo una mala conducta por parte de Trump.
Asimismo, los demócratas han pedido que en el juicio en el Senado se emitan citaciones para revisar documentos a los cuales la administración no dio acceso, y para contar con el testimonio de nuevos testigos que podrían tener información valiosa.
Pero los republicanos se han negado a eso, con el argumento de que era obligación de los representantes haber reunido toda la información necesaria, a pesar de que el mandatario ordenó a los miembros de su ejecutivo que no colaboraran con la pesquisa de los demócratas.
El senador republicano Tim Scott coincidió con Ernest en que las exposiciones de la fuerza azul no han alterado el apoyo de los republicanos al presidente. «Estoy buscando una bomba, simplemente no la he escuchado», manifestó.
Tales declaraciones no resultan para nada sorpresivas, dado que incluso desde antes del inicio del juicio el resultado esperado es que la mayoría roja en el Senado absuelva a Trump.
Aunque los 100 miembros de la Cámara Alta realizaron un juramento de imparcialidad, el propio líder de la mayoría, Mitch McConnell, indicó que no se comportará de ese modo y dijo que coordinaría todas sus actividades con la defensa del presidente.
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