La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) hizo un llamado al gobierno para cambiar su estrategia de inversión en Petróleos Mexicanos (Pemex), por un programa emergente de reactivación con inversión pública y privada.
El organismo patronal reiteró que el Plan de Negocios 2019-2024 de Pemex es insuficiente, porque no se han resuelto los principales problemas estructurales de la compañía petrolera.
Esto se demuestra con los números rojos que presentó la empresa petrolera en su reciente reporte financiero a la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), en el cual se indica que Pemex registró una pérdida anual de 346 mil 135 millones de pesos en 2019, esto es, 91.8 por ciento más que el resultado negativo obtenido al cierre del lapso anterior.
Las ventas de Pemex cayeron 21.6 por ciento anual en el cuarto trimestre de 2019, frente al mismo periodo de un año antes. La petrolera mexicana se vio afectada por menores ingresos por las ventas nacionales y al exterior de productos, ante un menor precio del barril de crudo.
Los costos de ventas de Pemex bajaron 5.3 por ciento, debido a una caída de 46 mil 800 millones de pesos en compra de productos para reventa, como las importaciones de gasolinas, y una disminución de 10 mil 900 millones de pesos en las pérdidas no operativas, referentes al robo de combustibles.
Ante los resultados negativos de Pemex, la Confederación Patronal señaló de nuevo en un comunicado que el Plan de Negocios 2019-2024 no sólo es insuficiente, sino que conlleva un alto riesgo de presiones a las finanzas públicas, por el tamaño de los recursos con los que se pretende apoyar a la petrolera.
Por otra parte, aseguró, ese plan “no incluye una reducción de deuda, ni recorte de costos de operación”
Además, insistió en que una de las principales limitantes de la estrategia presentada por el gobierno es que no ayudará a incrementar la participación de la inversión privada para generar mayor producción petrolera y recuperar la credibilidad de la compañía.
La Coparmex invitó por ello al gobierno federal a revaluar las decisiones para revertir la desaceleración marcada de la economía. Y para ello, reiteró su llamado a la Presidencia para iniciar un programa emergente de reactivación con inversión pública y privada, en el corto plazo.