París, 7 ago (Prensa Latina) En medio del deterioro de la situación epidemiológica en Francia ante el rebrote de la Covid-19, la prefectura de Bocas de Ródano estableció hoy el uso obligatorio de máscara en sectores de la sureña ciudad de Marsella.
La segunda urbe más poblada del país, solo superada por esta capital, se sumará mañana a la indicación que desde finales de julio comenzaron a emitir autoridades locales, hasta sobrepasar con holgura el centenar de ciudades que obligan a utilizar el medio de protección de la boca y la nariz en espacios públicos, como mercados y calles.
Los sectores marselleses afectados serán Vieux-Port-Hypercentre (durante el día) y Cours Julien-La Plaine y Escale Borély, en la noche.
El ministro de Salud Olivier Véran dejó en manos de las prefecturas y alcaldías la decisión de fijar el uso obligatorio de máscara, en sintonía con la situación particular de cada comuna.
En el departamento de Mayenne, sus 69 territorios están bajo esta medida, respaldada anoche por el presidente Emmanuel Macron, en una entrevista ofrecida al canal BFMTV después de su visita a El Líbano por las devastadoras explosiones del martes en el puerto de Beirut.
«La máscara nos protege y protege a los otros», dijo el mandatario, quien recordó el visto bueno gubernamental a las decisiones locales de imponer su utilización obligatoria.
Cuando comenzó la pandemia, en marzo, el gobierno francés desestimuló el uso masivo de la máscara, al argumentar entonces que solo era necesaria para enfermos y personal de la salud.
Esta postura generó críticas de políticos, autoridades electas, expertos y ciudadanos, y muchos de ellos acusaron al ejecutivo de actuar así ante su incapacidad de dotar al país de esos medios en cantidades suficientes.