Catorce personas, la mayor parte de ellas jóvenes de entre 16 y 25 años, fueron baleadas en tres ataques perpetrados por comandos armados, casi simultáneos, ocurridos la noche del pasado viernes, en la capital de Zacatecas.
En las colonias La Escondida fueron atacados cuatro personas, en Benito Juárez, cinco y en Fresnillo otros cinco. Seis murieron en los domicilios donde fueron atacados, y el resto trasladados a hospitales en ambulancias o automóviles particulares, heridos de gravedad.
En otros hechos presuntamente vinculados con ajustes de cuentas entre supuestos miembros del crimen organizado, tres personas más fueron asesinadas a tiros: la madrugada del sábado, en el Mercado de Abastos de la ciudad de Zacatecas, un hombre no identificado por las autoridades, fue acribillado, y en la colonia El Olivar, en Fresnillo, fueron asesinados a tiros dos jóvenes más.
A estos hechos, atribuidos a la pugna violenta por la plaza de Zacatecas, entre integrantes del Cártel Jalisco Nueva Generación y el Cártel de Sinaloa, se suman los ataques armados, contra las viviendas de dos jefes policiacos: el comandante “Santos”, jefe operativo de la Policía Ministerial en la ciudad de Jerez, donde resultaron heridos de bala tres policías, y el Comandante “Luger”, director general de la Policía Estatal Preventiva de Zacatecas (PEP).
Estos ataques –ante los que la Secretaría de Seguridad Pública de Zacatecas ha mantenido silencio-, aunados al incendio provocado por hombres armados, a un comercio en Guadalupe, y un domicilio particular en la ciudad de Fresnillo, se produjeron justo después de que el gobierno federal reveló que la entidad, sigue ocupando los primeros lugares en incidencia delictiva de alto impacto en el país.
De acuerdo con el más reciente informe del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional Seguridad Pública (SESNSP), hasta el pasado 31 de julio, Zacatecas ocupa el primer lugar en extorsión; el quinto en trata de personas; el tercero en secuestros y el quinto en homicidios dolosos en el país.
En materia de homicidio doloso –acumulado de enero a julio-, la media nacional por cada 100 mil habitantes es de 16.0, ubicando a Zacatecas en quinto sitio, con una tasa de 33.5; detrás de Colima (51.2); Baja California (45.1); Chihuahua (43.8) y Guanajuato (43.3).
En otro indicador, catalogado por la SESNSP como la “Variación de incidencia delictiva de homicidio doloso de mujeres”, comparativo entre 2019 y 2020, “a la alza”, el primer lugar nacional lo ocupa Zacatecas, con 56.5 por ciento, seguido por Yucatán, San Luis Potosí, Michoacán y Guanajuato.
Respecto al delito de secuestro, Zacatecas se mantiene en tercer lugar nacional en casos por cada 100 mil habitantes, cuya media es de 0.48. Los primeros dos lugares del país los ocupan Morelos (2.64) y Tlaxcala (1.52), tomando en cuenta en todos los casos, los secuestros denunciados formalmente ante las fiscalías estatales, sin contar con la cifra negra, que se estima aún es un elevado porcentaje.
Asimismo, la entidad ocupa el primer lugar nacional en el delito de extorsión, cuya tasa media nacional, es de 3.8 casos por cada 100 mil habitantes. En Zacatecas el índice es de 13.0, seguido por la Ciudad de México, con 9.5; Quintana Roo con 9.4; Colima con 9.3 y Querétaro con 7.1.