Expertos desmienten 4 rumores sobre la vacuna contra Covid-19

Toluca, Estado de México; 01 de enero de 2021.- A raíz de los resultados positivos en las vacunas desarrolladas por diversas farmacéuticas para combatir la pandemia de Covid-19 han surgido falsas noticias y rumores acerca de las desventajas que podría traer la vacunación.

Lejos de contribuir a la estabilidad emocional de las personas en medio de la pandemia, se han propagado rumores que alertan de supuestas conspiraciones en contra de la humanidad, en caso de que las personas decidan vacunarse, desde los supuestos complots para implantar microchips en el cuerpo hasta la presunta reingeniería del código genético. A continuación, cuatro teorías conspirativas desmentidas por expertos con argumentos científicos.

1.- “Alteración del ADN”

El temor de que la vacuna podría de alguna manera cambiar tu ADN es una de las teorías que más frecuentemente se lanzan en las redes sociales.

De acuerdo con los científicos, la vacuna de coronavirus no alteraría el ADN humano.

Algunas de las nuevas vacunas creadas, incluyendo la de Pfizer/BioNTech que ya se aplica en México, usan fragmentos del material genético del virus -o ARN mensajero.

“El inyectar ARN a una persona no cambia nada del ADN de una célula humana”, explicó el profesor Jeffrey Almond de la Universidad de Oxford.

El sistema inmune aprende a reconocer y producir anticuerpos contra la proteína.

Los comentarios en redes sociales han señalado que la tecnología de inoculación con ARN mensajero (ARNm) “nunca ha sido puesta a prueba o aprobada antes”.

Es cierto que ninguna vacuna ARNm ha sido aprobada con anterioridad, pero se han realizado múltiples estudios de vacunas ARNm en humanos en los últimos años. Y, desde el inicio de la pandemia, la vacuna ha sido analizada en decenas de miles de personas en todo el mundo y sometida a un riguroso proceso de seguridad para su aprobación.

Como toda nueva vacuna, debe pasar por severos exámenes de seguridad antes de que pueda ser recomendada para su uso general.

2.- Bill Gates y las denuncias de microchips

Esta falsa noticia le ha dado la vuelta al mundo. Afirma que la pandemia del coronavirus es un plan encubierto para implantar en la gente microchips rastreables y que Bill Gates, el cofundador de la empresa de tecnología Microsoft, está detrás de éste.

No hay tal vacuna con “microchip” y no hay evidencia que apoye las denuncias que Bill Gates esté planeando hacer esto en el futuro. La Fundación Bill y Melinda Gates indicó que esa afirmación es “falsa”.

Los rumores se propagaron cuando Gates dijo en una entrevista que a la larga “tendremos unos certificados digitales” que podrían mostrar quién se ha recuperado, hecho la prueba y finalmente si fue vacunado. Pero no hizo mención de microchips.

Esto condujo a un artículo ampliamente compartido que se titulaba: “Bill Gates usará microchips implantados para combatir el coronavirus”.

El artículo se refiere a un estudio, financiado por la Fundación Gates, sobre una tecnología que podría almacenar los registros de vacunas de alguien en una tinta especial aplicada al mismo tiempo que una inyección.

Sin embargo, la tecnología no es un microchip, es más bien como un tatuaje invisible. Todavía no se ha lanzado y tampoco permitiría el rastreo de las personas ni que la información se almacene en una base de datos, aclara Ana Jaklenec, una científica que trabaja en el estudio.

El multimillonario fundador de Microsoft ha sido objeto de muchos rumores falsos durante la pandemia debido a su trabajo filantrópico en el campo de la salud pública y el desarrollo de vacunas.

3.- Tejido fetal

Se han propagado rumores acerca de que las vacunas contienen el tejido pulmonar de un feto abortado. Eso es falso.

“No se han usado células fetales en el proceso de producción de ninguna vacuna”, afirmó el doctor Michael Head, de la Universidad de Southampton.

Un video en particular que se publicó en una de la principales páginas antivacunas en Facebook hace referencia a un estudio que el narrador afirma muestra evidencia de lo que contiene la vacuna desarrollada por AstraZeneca y la Universidad de Oxford. Sin embargo, el narrador está equivocado: el estudio en cuestión exploraba cómo la vacuna reaccionaba cuando era inyectada en células humanas en el laboratorio.

La confusión pudo darse porque hay un paso en el proceso de desarrollo de la vacuna que usa células criadas en un laboratorio, que descienden de células embrionarias que de otra manera hubieran sido destruidas. Esa técnica fue desarrollada en los años 60 y no se abortaron fetos para esa investigación.

Muchas vacunas son producidas de esta manera, explicó el doctor David Matthew, de la Universidad de Bristol. El experto agregó que cualquier rastro de las células se elimina completamente.

Los desarrolladores de la vacuna en la Universidad de Oxford dicen haber trabajado con células clonadas, pero que estas células “no son en sí células de bebés abortados”.

Las células se desempeñan como una fábrica que produce una versión muy debilitada del virus que ha sido adaptada para funcionar como una vacuna.

No obstante, aunque el virus debilitado se crea utilizando estas células clonadas, ese material celular se remueve cuando el virus es purificado y no se utiliza en la vacuna.

4.- Tasa de recuperación

En algunas afirmaciones contra la vacuna de Covid-19 compartidas en las redes sociales se ha cuestionado la necesidad de una inoculación si las probabilidades de morir del virus son tan bajas.

Hay publicaciones circulando en las redes que sugieren que contagiarse de Covid-19 es una opción más segura que vacunarse.

Jason Oke, experto en estadística de la Universidad de Oxford, señala que “en todos los casos los riesgos dependen mucho de la edad y no toman en consideración la mortalidad a corto y largo plazo de Covid-19”.

No se trata únicamente de sobrevivir. Por cada persona que muere, hay otras que sobreviven, pero atraviesan cuidados médicos intensivos y otras que sufren complicaciones de salud crónicas.

Eso puede contribuir a que los servicios de salud queden sobrecargados de pacientes con covid, compitiendo por los recursos limitados de los hospitales en el tratamiento de otras enfermedades y lesiones.

Con información de (AMX Noticias)