México, 11 nov (Prensa Latina) El presidente Andrés Manuel López Obrador defendió hoy la designación de Pablo Gómez al frente de la estratégica Unidad de Inteligencia Financiera tras la salida de Santiago Nieto, que causó tanto revuelo.
El mandatario dijo que Nieto es un abogado profesional y recto, a quien le tiene mucho respeto, pero su remoción se debió a que no se puede tolerar ningún acto de extravagancias como su suntuosa boda con una consejera del Instituto Nacional Electoral, organismo enfrentado al Gobierno.
López Obrador agregó que no se podía permitir que siguiera en la UIF pues aunque se trata de un evento privado la oposición iba a atacar su Gobierno con este hecho. La boda se realizó en Guatemala, a donde los invitados fueron desde México en un avión particular rentado.
Por esos motivos, añadió, decidió el relevo en la dependencia, la cual ahora encabeza Gómez, quien, destacó, «ha resistido todas las tentaciones porque también en la oposición un dirigente se puede corromper»
Gómez es un político que se destaca por su austeridad y el gran sentido de honestidad expresado desde el histórico grupo de la generación del 68, es decir, sobrevivientes de la masacre de Tlatelolco y con cargos públicos en más de 50 años en los que ha demostrado ser incorruptible, señaló.
El nuevo jefe de la UIF, caracterizada por su enfrentamiento a la corrupción y a las mafias de narcotraficantes a las que les ha incautado millones de dólares y develado malversaciones como en los casos ligados a Odebrecht, denunció en la toma de posesión del cargo que en México pervive un Estado corrupto el cual hay que desmontar.
Dijo que el actual ejecutivo encontró la gravísima situación de la utilización de la corrupción como sistema integrado a la forma de gobierno, algo distinto a lo que ocurre en cualquier país, y como cosa diferente hay que atacarlo a fondo.
Consideró que la UIF se volvió un instrumento central en el combate a la corrupción con la llegada del presidente López Obrador. Antes era una suerte de apéndice del Estado corrupto, «operaba dentro, en los márgenes», y eso ha cambiado en estos años, aseguró.
Reconoció el trabajo que deja Nieto al frente de la UIF, pero lamentablemente tuvo que abandonar el cargo por el ruido mediático en torno a su boda con la consejera Carla Humphrey el sábado pasado en la ciudad de Antigua Guatemala.