Barcelona busca póker y Real Madrid quiere cambiar dinámica

Por Fausto Triana

Madrid, 4 abr (Prensa Latina) Un triunfo del Barcelona le daría un póker sobre el Real Madrid este año, pero los merengues quieren cambiar la dinámica y el fútbol vivirá mañana otro Clásico vibrante.
En las respectivas ruedas de prensa previas al duelo de vuelta de venidero miércoles, en semifinales de la Copa del Rey, los técnicos Xavi Hernández (Barça) y el italiano Carlo Ancelotti (Madrid) quitaron hierro al favoritismo y cada cual dio favorito al contrincante.
Lo cierto es que para Xavi el ambiente es más relajado. Goza de cómoda ventaja de 12 puntos en LaLiga sobre la «casa blanca» y llega al cotejo en cancha propia, Camp Nou, con un gol arriba y un ritmo de juego contundente.
Por lo general, al Real Madrid se le han hecho esquivos los títulos en la Copa del Rey, pero Ancelotti sabe que es uno de los dos asideros que le resta al club en la temporada, el otro aun más difícil, la Champions League.
Su oponente, además de sentirse en estado dulce, es el que más trofeos de Copas del Rey acumula, con 31. Además, el factor psicológico que destaca a un Barcelona triunfador en la Supercopa de España (3-1), en el partido de ida de la Copa (0-1) y en el Clásico de liga (2-1).
No obstante, arrastra bajas importantes como el francés Ousmane Dembélé, el español Pedri González, el danés Andreas Christensen y el neerlandés Frenkie de Jong.
Apostará sin dudas por el polaco Robert Lewandowski, el brasileño Raphinha y tal vez otro delantero, probablemente el joven Ansu Fati; con el veterano Busquets y Gavi como figuras en la medular, lo mismo que el uruguayo Ronald Araujo y el francés Koundé en la zaga, con Ter Stegen en el arco.
Los merengues vienen de pasar la aplanadora al Valladolid 6-0, con un hat-trick del francés Karim Benzema, uno del brasileño Rodrygo y el resto de los españoles Marco Asensio y Lucas Vázquez.
Una nota esperanzadora es el reencuentro de la capacidad goleadora de Benzema, si bien el rival no era un medidor demasiado exigente.
Como quiera que la intensidad del calendario no da tregua para los de la capital, Ancelotti deberá decidir cómo afrontar una seguidilla de retos en el curso de apenas una semana.
Comienza con el Barça, a continuación el sábado en el torneo local contra el rocoso Villarreal, y el 12 de abril ante el Chelsea en cuartos de final de la Champions League.
Por seguro enviará a la cancha al brasileño Vinicius Junior, quizá con su compatriota Rodrygo y Benzema como tridente ofensivo; el croata Luka Modric con el uruguayo Fede Valverde y el galo Camavinga; otro brasileño, Militao, de central con el germano Rudiger y el belga Courtois en portería.
Lo mismo en el Barcelona como en el Real Madrid, el resto de las alineaciones serán las incógnitas de los entrenadores hasta último momento mañana.