Roma, 16 nov (PL) El ex primer ministro italiano Silvio Berlusconi reconoció hoy en esta capital la incapacidad de su partido de centroderecha Pueblo de la Libertad (PDL) para derribar al Gobierno, debido a divisiones en las filas de la organización.
Tras la decisión del exjefe de Estado de relanzar Forza Italia, agrupación política que lo llevó a la victoria electoral de 1994, su seguidor el viceprimer ministro Angelino Alfano declaró que no respaldaría dicha iniciativa.
En declaraciones la víspera, Alfano, hasta el momento secretario general del PDL, anunció la creación de un grupo separatista bajo su mando con el nombre Nuevo Centroderecha.
Según medios de prensa locales, los desacuerdos entre ambos líderes políticos se deben a las intenciones de Il Cavaliere, como también se conoce a Berlusconi, de actuar contra el gobierno italiano si éste aprueba su expulsión del Parlamento.
Quien no se reconozca en los valores de nuestro movimiento es libre de irse, afirmó el exmandatario en una carta abierta publicada el pasado viernes, un día antes del inicio del Consejo Nacional del PDL, cuyo futuro es incierto tras el regreso de Forza Italia.
La probable expulsión del Senado de Berlusconi corresponde a lo estipulado por la ley Severino, la cual prohíbe la pertenencia al Parlamento a personas con condenas judiciales mayores de dos años.
El exgobernante italiano (1994-1995, 2001-2006 y 2008-2011) enfrenta una sentencia de cuatro años de privación de libertad por cargos de evasión fiscal, aunque no irá a la cárcel por su avanzada edad, 77 años.
Las amenazas de derrocar el Ejecutivo italiano actual realizadas por Il Cavaliere responden a la negativa del primer ministro, Enrico Letta, de ayudarlo con sus problemas legales.