Naciones Unidas, 7 mar (PL) Siria denunció hoy en el Consejo de Seguridad el reclutamiento de niños soldados por grupos armados antigubernamentales, a los cuales también acusó de asesinar infantes en el conflicto que azota al país árabe.
Los terroristas alistan a menores de edad para combatir, los explotan y masacran, advirtió el embajador permanente sirio ante la ONU, Bashar al-Jaafari, al intervenir en un debate abierto del Consejo sobre los niños soldados. El diplomático ratificó el compromiso de Damasco con el respeto a los tratados y convenios internacionales para proteger los derechos humanos de los infantes.
Nuestro gobierno continúa realizando grandes esfuerzos para cumplir sus obligaciones, y presenta de manera reiterada pruebas de los crímenes cometidos por los extremistas contra niños, señaló a propósito de la crisis en Siria, donde grupos armados desde el exterior han tratado por tres años de derrocar al presidente legítimo, Bashar al Assad.
Al-Jaafari recordó que las leyes de la nación árabe castigan con la pena capital a quienes reclutan a menores de edad.
Hemos asumido el compromiso de enfrentar con decisión cualquier forma de violación de los derechos humanos, y de cooperar con Naciones Unidas y otras organizaciones en esos temas, dijo.
El diplomático manifestó, además, el rechazo de Damasco a la politización y la manipulación de lo que ocurre en Siria En un aparte con periodistas acreditados aquí, durante el foro del órgano de 15 miembros, la representante especial del Secretario General para los Niños y los Conflictos Armados, Leila Zerrougui, confirmó que el denominado Ejército Libre Sirio (ELS) y grupos asociados incorporan niños a sus filas.
Zerrougui ya había señalado antes esta situación, junto a sus gestiones con jefes del ELS para buscar el fin de tal práctica, que incluye el uso en acciones militares y como espías, mensajeros, contrabandistas y cocineros.
El Consejo de Seguridad adoptó hoy una resolución condenatoria del reclutamiento de menores de edad, texto aprobado en el marco de la campaña mundial lanzada la víspera por la ONU «Niños, no soldados».