EE.UU. apoya grupos ligados a Al Qaeda para derrocar gobierno sirio

Washington, 4 abr (PL) Nuevas revelaciones indican que pese a sus declaraciones públicas, el Gobierno de Estados Unidos financia y apertrecha de manera secreta a la red terrorista Al Qaeda para derrocar al presidente de Siria, Bashar al-Assad.

A principios de año, Washington y monarquías del golfo Pérsico iniciaron un esfuerzo propagandístico para lavar la maltrecha imagen de los mercenarios que pugnan por subvertir el régimen político de Damasco, en cuyas filas militan elementos extremistas.

Refiere un artículo del diario británico The Telegraph, que grupos de la llamada oposición armada recibieron millones de dólares y pertrechos más sofisticados para enfrentarse a los yihadistas del Estado Islámico de Irak y el Levante (ISIS, por sus siglas en inglés), una derivación de Al Qaeda.

Según la publicación, la Agencia Central de Inteligencia (CIA) y los órganos de inteligencia de Arabia Saudita y Catar, crearon el Frente Revolucionario Sirio (SRF), una entidad de carácter «moderado» con el supuesto objetivo de combatir a la entidad otrora liderada por el asesinado Osama bin Laden.

El líder del SRF, Jamal Maarouf, reconoció al rotativo que en realidad no tiene ningún problema para trabajar con Al Qaeda, «siempre y cuando el objetivo sea derrocar al gobierno de al-Assad.

Según Maarouf, sus benefactores (Estados Unidos, Arabia Saudita y Catar) lo autorizaron a proporcionar armas al Frente al-Nusra, otra rama de Al Qaeda, a pesar de la campaña de propaganda y el pretendido combate contra la entidad terrorista.

Al-Nusra reconoce abiertamente el asesinato y ejecución sumaria de soldados sirios, así como la decapitación de cristianos, además del disparo de obuses de mortero y colocación de coches bomba en puestos militares y zonas de gran concentración de civiles, como demuestran innumerables videos colgados en Internet.

En diciembre pasado, un artículo del diario The Washington Post reveló que el gobierno estadounidense empleaba métodos de inteligencia encubierta, incluso recurriendo a organizaciones considerada enemigas, con tal de subvertir y liquidar al gobierno de Damasco.

Siria padece desde hace tres años un agudo conflicto armado entre el gobierno y grupos opositores, integrados en su mayoría por entidades fundamentalistas y radicales islámicos que pretenden derrocar a al-Assad e imponer un califato donde rija la sharia o ley islámica.

Damasco acusa a Catar, Arabia Saudita, Turquía, así como a gobiernos occidentales y de la región de brindar amplio apoyo financiero, logístico y mediático a los denominados rebeldes sirios para impulsar lo que consideran como un cambio de régimen.

Diversos documentos constatan la agudización del mercenarismo en la nación levantina, con la presencia de unos 100 mil combatientes de 83 naciones asociados a a la red terrorista Al Qaeda.

Deja tu comentario