Presidentes de los partidos políticos del PAN, PT, Movimiento Ciudadano, PVEM y Nueva Alianza en el Distrito Federal hicieron un llamado al Senado de la República para que en la reforma política de la Ciudad de México las delegaciones sean transformadas en alcaldías con sus respectivos cabildos, “desde la próxima elección en 2015”.
En conferencia de prensa, convocada por la Junta de Coordinación Política del Senado, los representantes de estos institutos políticos señalaron que esa “figura republicana” permitirá establecer los contrapesos reales, propiciar un gobierno de cercanía con la ciudadanía y de mayor pluralidad.
El senador panista Jorge Luis Preciado Rodríguez, presidente de la JUCOPO, explicó que en la Cámara de Senadores ya se instaló una mesa conformada por legisladores de todos los partidos, que llevará a cabo los trabajos de la reforma política del DF.
La intención es aprobar la reforma antes de que concluya el actual periodo ordinario de sesiones, agregó.
El coordinador de los senadores priistas, Emilio Gamboa Patrón señaló que la transformación de las delegaciones en alcaldías “es un gran clamor”, por lo que “sin duda alguna” las comisiones dictaminadoras trabajarán en este tema.
Mencionó que hay una necesidad de una reforma profunda para la capital del país, y por ello, en el Senado se debe hacer un trabajo serio, donde se escuche a todas las voces para que transmitan qué es lo que están viviendo, qué es lo que creen que puede mejorarse, qué es lo que no funciona en el DF y “nosotros lo vamos a ver con gran seriedad en las comisiones”.
Aseguró que los coordinadores parlamentarios respetarán el trabajo de los presidentes de las comisiones dictaminadoras y de sus mesas directivas, “somos respetuosos de que ellos sesionen, que tomen el debate y deliberen”.
Mauricio Tabe Echartea, presidente de Acción Nacional dijo que los distintos partidos en la Ciudad han coincidido en la necesidad de transformar las delegaciones en alcaldías con cabildos, a fin de que se incluya en la toma de decisiones locales las voces de otras fuerzas políticas.
Esta necesidad, subrayó, responde a un clamor ciudadano para darle mayor eficacia al Gobierno del Distrito Federal y asegurar una mayor pluralidad y contrapesos en estos órganos colegiados
Adolfo Orive, presidente del Partido del Trabajo recordó que en 2010 la Asamblea Legislativa del DF presentó al Senado un proyecto de reforma que fue firmado por todas las fuerzas políticas y “en esa iniciativa iba claramente establecidos los cabildos en cada una de las delegaciones”, así como una nueva demarcación, pues hay delegaciones muy grandes como Iztapalapa, que tiene casi dos millones de habitantes.
Indicó que en esta ocasión, cinco de los siete partidos políticos han firmado una carta donde hacen la petición de transformar las delegaciones en alcaldías desde la próxima elección en 2015, la cual no fue signada por el PRI “por las circunstancias que ustedes conocen y no la firmó el PRD por otras circunstancias, que me imagino, ustedes las pueden suponer”.
A su vez, Samuel Rodríguez Torres, titular del PVEM, hizo notar la necesidad de que la Ciudad de México cuente con una constitución propia y se sumó “al reclamo que existe de poder establecer alcaldías y cabildos” en el distrito Federal, a efecto de abrir la puerta a la democracia y tener un contrapeso real.
Expresó que han sido espectadores de los casos de corrupción en varias delegaciones, por lo que con este nuevo sistema se permitiría combatir este problema.
Jesús Cuauhtémoc Velasco Oliva, asambleísta de Movimiento Ciudadano, pidió se permita al DF redefinir su estructura político administrativa y sentar las bases para una mejor gobernabilidad.
Opinó que es fundamental que se facilite y propicie que haya un gobierno de cercanía y mayor pluralidad en el caso de las delegaciones, donde haya cabildos conformados por todas las fueras políticas para que se hagan decisiones colegiadas y no solamente unipersonales.
Para Jorge Gaviño Ambriz, presidente de Nueva Alianza de nada serviría dar más facultades al gobierno de la Ciudad ni a los delegados si no se tienen los contrapesos necesarios, por lo que los senadores “tienen en sus manos la posibilidad de dar un paso histórico para lograr realmente un gobierno de cara a la gente donde exista la transparencia y la rendición de cuentas.