Kiev, 19 may (PL) Los autoproclamados gobernantes ucranianos ratificaron hoy su falta de voluntad de diálogo con el anuncio de presiones económicas contra las zonas rebeldes y la decisión de reprimir a la prensa, mientras el Pentágono refuerza su presencia cerca de Rusia.
Arsén Avákov, ministro de Interior provisional designado tras el golpe de Estado del 22 de febrero, afirmó que cesarán los pagos de sueldos y pensiones del presupuesto estatal a la población de Slaviansk y Kramatorsk, en la declarada independiente República Popular de Donetsk.
El titular de una de las carteras a cargo de la represión en esa zona esgrimió como pretexto que resulta imposible llevar a cabo las funciones públicas para pagar a la población.
Las líneas eléctricas y la infraestructura de estas ciudades han sido dañadas, dijo al referirse a las urbes bombardeadas por la Aviación de Kiev, según mostraron testigos al Primer Canal de la televisión rusa.
Avákov comentó que probablemente se detendrán los pagos de las obligaciones del Gobierno relacionadas con las pensiones y los salarios en esta región del suroriente hasta que se dé la posibilidad de pagarlos.
La subsecretaria del Consejo Nacional de Seguridad y Defensa, Victoria Syumar, por su parte, informó en su cuenta de Facebook que los periodistas rusos Oleg Sidyakin y Marat Saychenko, detenidos la víspera en Kramatorsk, serán enjuiciados.
Syumar indicó que los dos reporteros serán acusados de «promoción del terrorismo, conspiración con los terroristas y asistencia al terrorismo» por filmar en las zonas de combate y entrevistar a milicianos federalistas y a la población de las áreas bombardeadas.
Medios de prensa mostraron hoy las fotos de estos profesionales rusos junto a otros colegas esposados y obligados a permanecer arrodillados en el piso.
La unión de Periodistas de Rusia (UPR) instó a liberar inmediatamente a esos afiliados, mientras a instancias del canciller, Serguei Lavrov, la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) se unió a esa exigencia.
Dunja Mijatovic, responsable de la OSCE para la Libertad de Prensa, exigió en un comunicado a las autoridades ucranianas que dejen de amenazar e intimidar a los periodistas para que puedan realizar sus tareas profesionales.
En este contexto, hoy se anunció que el 21 de mayo en Donetsk se llevará a cabo la tercera ronda de la unidad nacional bajo la presidencia de los exmandatarios Leonid Kravchuk y Leonid Kushma, pero sin la presencia de los federalistas, según el oligarca Serhiy Taruta, gobernador regional designado por la junta de Kiev.
Washington, entre tanto, confirmó que el viernes 23 de mayo entrará en el Mar Negro el crucero portamisiles de alta precisión Vella Gulf, con lo cual ya suman tres de este tipo los desplegados cerca de las fronteras de Rusia.
Con sus 122 cohetes dirigidos, esta fortaleza cumplirá misiones del Comando de la Marina de Estados Unidos en la parte oriental del mar Negro, informó Itar-Tass, según el Pentágono.
Ucrania aleja diálogo con represión y respaldo de Washington
