San José, 29 may (PL) La disminución de la actividad eruptiva del volcán costarricense Turrialba cumple hoy dos días, aunque persiste la atención de los expertos sobre el coloso, cuyas emanaciones de ceniza y gases afecta a pobladores, cultivos y ganado.
El reporte del Observatorio Vulcanológico y Sismológico de Costa Rica (Ovsicori) de las 17:00, hora local, precisa que es mínima la presencia de tremor (señal sísmica generada por vibraciones producidas por el paso de fluidos -gases, líquidos o magma- por grietas y conductos internos), con lo cual se mantiene la calma.
Por el tiempo imperante en la zona ha sido imposible observar la cima del Turrialba por medio de la cámara web ubicada en el volcán Irazú, indica el informe del Ovsicori.
Añade que las fotografías compartidas por nuestros usuarios en redes sociales durante la mañana de este domingo revelan una columna blanca, compuesta principalmente de vapor de agua y gases.
Añade que se mantiene la vigilancia continua y pendientes de cualquier cambio que se genere en el Turrialba, el segundo volcán más alto de Costa Rica, de tres mil 340 metros de altura, detrás del Irazú, de tres mil 432 metros.
A las 21:45, hora local, del martes pasado y tras casi 24 horas de calma, el coloso presentó la mayor y más potente erupción del año, la cual generó una columna de cenizas y gases vertical bien sostenida que alcanzó una altura estimada de tres mil 500 metros sobre la cima del volcán y de seis mil 800 metros sobre el nivel del mar.
Por ello, los expertos no descartan una nueva fuerte explosión del cerro o que entre en un período más prolongado de pasividad-activa.
Sin embargo, lo peor de los 31 días de emanaciones radica en las afectaciones provocadas por la caída de ceniza en zonas aledañas al coloso, donde agricultores aseguran haber perdido buena parte de sus cosechas de viandas y hortalizas, mientras ganaderos ya contabilizan una reducción de un 15 por ciento en la producción lechera.
Debido a ello, el Sistema Banca de Desarrollo (SBD) aprobó una nueva línea de crédito por 10 mil millones de colones (unos 19 millones de dólares), los cuales se suman a los cinco mil millones (unos 9,5 millones de dólares) anteriores, para atender las emergencias provocadas por la intensa actividad del volcán Turrialba.
Tras más de 130 años pasivo, el Turrialba despertó en 2007 y desde el 5 de enero de 2010 presenta erupciones de consideración, como las de octubre de 2014 y la del 12 de marzo de 2015, que obligaron a suspender el tráfico aéreo en esta capital.
Baja actividad eruptiva del vocán Turrialba dura dos días
