Ante la magnitud de los fenómenos naturales, es urgente contar con sistemas de atención capacitados que garanticen la respuesta oportuna de los organismos responsables de la protección y seguridad de los ciudadanos.
Lo anterior, como uno de los componentes del Sistema de Prevención y Mitigación de Emergencias de una localidad, afirmó el secretario de Seguridad Pública del Distrito Federal (SSPDF), doctor Jesús Rodríguez Almeida, durante la Entrega de Constancias a los participantes del Programa de Formación de Brigadistas en la Especialidad de Búsqueda Y Rescate.
En la ceremonia, a la que asistió el secretario de Protección Civil capitalino, Fausto Lugo García, el funcionario recordó que en 1985, en momentos posteriores al sismo del 19 de septiembre, cientos de personas, con heroica intención, se dedicaron a ayudar a víctimas en edificios colapsados.
Sin embargo, dijo, lo hacían en forma por demás desorganizada y sin coordinación. Además, las herramientas y procedimientos con las que se contaban en ese momento eran pocos e inadecuados, subrayo.
El jefe de la Policía capitalina señaló que en la historia reciente de la ciudad, la experiencia que se ha tenido en la atención de emergencias mayores y desastres, ha generado áreas de oportunidad y, además, ha evidenciado la necesidad de tener personal capacitado y equipado para brindar a la ciudadanía servicios profesionales ante un desastre.
Por ello, destacó que con el esfuerzo del Gobierno del Distrito Federal y sus dependencias, se logró concretar la capacitación de 239 elementos de la Dirección General de la Policía Metropolitana (PM) y de la Dirección Ejecutiva del Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas (ERUM).
Finalmente, aclaró que la capacitación fue puesta a prueba durante la atención del siniestro en la Torre B del Complejo Administrativo de PEMEX, donde tanto elementos de la PM como del ERUM demostraron la capacidad técnica con que contamos. Por ello, buscaremos continuar la formación de más brigadistas en la especialidad.
Por cierto, subrayó, el ERUM es reconocido actualmente como la Fuerza de Tarea número 2 de los grupos de rescate, tomando como modelo el programa de la Oficina de Asistencia para Desastres del Gobierno de Estados Unidos, América Latina y el Caribe.