La Habana, 21 sep (PL) El presidente de Ecuador, Rafael Correa, conversó con el líder histórico de la Revolución cubana, Fidel Castro, y con el presidente Raúl Castro, quien lo despidió hoy en la terminal aérea, en esta capital.
Poco más de la media noche, Correa dijo a la prensa acreditada que dialogó este viernes con Fidel Castro por más de dos horas durante la única jornada de su estancia en este país, a donde llegó por la provincia de Santiago de Cuba para una visita de trabajo.
«Siempre es un gran honor y siempre es un momento muy grato compartir con alguien que es una historia viviente de América Latina», afirmó.
Acompañado por su canciller, Ricardo Patiño, el mandatario señaló que el objetivo de su viaje fue conocer con mayor profundidad el sistema de salud cubano y su sostenimiento, y añadió que en especial abundó respecto a la atención a personas con capacidades especiales.
Indicó que el gobierno de este país caribeño invierte el nueve porciento de su Producto Interno Bruto en el campo de la salud, mientras Ecuador cerca del siete porciento.
«Realmente hemos tenido resultados extraordinarios, pero creo que nos falta eficiencia», aseveró al referirse a los esfuerzos en Ecuador para elevar la calidad de la atención sanitaria.
Expuso que la nación ecuatoriana va a cooperar con Cuba en la construcción de unas mil 560 viviendas en territorio santiaguero destinadas a damnificados por el huracán Sandy, que azotó esa ciudad en 2012.
Según explicó, en una primera etapa serán edificadas 560, para lo cual se prepara el terreno a fin de iniciar las labores.
Preguntado en torno al incidente con el avión de su homólogo venezolano, Nicolás Maduro, consideró de terrible que le hayan negado el paso sobre Puerto Rico, aunque el Departamento de Estado de Estados Unidos dijera que no fue así.
En todo caso, añadió, si sabían que era el presidente Maduro (quien iba en ese vuelo) y se le negó el paso por Puerto Rico, pues debe haber una protesta unánime de América Latina.
Respecto a la situación en Siria, expresó que es un asunto complejo y su gobierno rechaza toda injerencia militar extranjera en ese país, y, por el contrario, está a favor de una salida pacífica y democrática al conflicto.
«No nos engañemos, están enviando desde el exterior armas a Siria», aseveró tras indicar que es preciso evitar eso para que las partes se sienten a conversar y no se genere más violencia en esa nación.
Acudieron a despedir a Correa el primer vicepresidente cubano, Miguel Díaz-Canel, el canciller Bruno Rodríguez, y el embajador ecuatoriano en La Habana, Edgar Ponce.