Washington, 3 oct (PL) El Pentágono entregó fondos millonarios a la Policía Nacional de Afganistán, pero ejerce muy poco control sobre ese dinero, lo que contribuye al derroche, el fraude y el abuso de autoridad, señala hoy un informe oficial.
Según John Sopko, inspector general especial para la Reconstrucción de Afganistán (Sigar), esta falta de supervisión ocasionó que las unidades afganas adquirieran productos a precios demasiado altos, lo que ocasionó costos cuestionables para el gobierno estadounidense.
Entre octubre de 2011 y diciembre de 2012, el Pentágono pagó alrededor de 27 millones de dólares directamente a la Policía Nacional afgana para adquirir combustible, pero no realizó ninguna evaluación sobre los peligros de fraude en las operaciones.
Sin embargo, los funcionarios norteamericanos asignaron más de 243 millones de dólares para esos gastos para el año fiscal 2014, que comenzó el 1 de octubre pasado, sin tener un plan para mitigar esos riesgos, añade el informe.
En otro informe similar al Congreso en julio pasado, Sopko señaló que miles de millones de dólares destinados a las fuerzas de Estados Unidos en Afganistán están fuera de control y pueden caer manos de grupos insurgentes y terroristas que operan en ese país.
La Casa Blanca planifica reducir los efectivos militares en el país asiático de 63 mil que ahora mantiene, a menos de 10 mil después de diciembre de 2014, pero Washington evalúa una llamada opción cero o retirada total de sus unidades.
Como paso previo, el plan del Pentágono prevé que las fuerzas estadounidenses se reduzcan a 34 mil para febrero de 2014.
Según el Pentágono, la operación de retirada de las tropas de Estados Unidos de Afganistán tendrá un costo de unos siete mil millones de dólares, en parte debido a que en el país asiático continúan los combates contra los talibanes.
Desde que Estados Unidos inició la guerra contra ese país asiático en octubre de 2001, unos dos mil 280 norteamericanos murieron y otros 17 mil 670 resultaron heridos en la contienda, mientras el costo total aproximado de las operaciones rebasa el billón de dólares, según datos oficiales.