Bogotá, 17 oct (PL) Los universitarios colombianos que protestan por mejoras en la educación llegaron a un acuerdo para abandonar las instalaciones del edificio del Instituto de Crédito Educativo y Estudios Técnicos en el Exterior, donde estuvieron recluidos en una toma pacifica.
Desde horas de la mañana de ayer hasta la madrugada, los estudiantes permanecieron en el edificio mientras otro numeroso grupo se desplazó desde la céntrica Carrera Séptima hasta la Plaza de Bolívar para exigir soluciones al déficit de la educación en el país.
En declaraciones a medios de difusión locales, uno de los voceros de la Mesa Amplia Nacional Estudiantil (MANE), Boris Duarte, apuntó que firmaron un acuerdo con el director del Instituto, Fernando Rodríguez, para desocupar las instalaciones.
Rodríguez se comprometió a servir de mediador entre los estudiantes y el Gobierno para resolver la crisis y se estipuló que los que ocuparon las instalaciones no serán judicializados o estigmatizados, sostuvo Duarte.
El estudiantado reclama el reconocimiento de la deuda de 11,3 billones de pesos (unos seis millones de dólares) que tiene el Estado con las universidades públicas y una urgente mesa de concertación donde se definan tiempos, participantes y metodologías para la discusión de la educación superior que requiere la nación.
Esperamos que el presidente Juan Manuel Santos «le responda al país sobre la situación real de la universidad colombiana y se nos reconozca como actores en el debate sobre la educación superior; no nos puede seguir excluyendo», apunto en declaraciones recientes otro de los líderes estudiantiles, Jairo Rivera.
Miles de jóvenes salieron a la calles, la mayoría con sus torsos desnudos, pintados con letreros en los que se podía leer «libertad para la participación política», «sí a la educación de calidad» o «este tal paro si existe».
Hoy se espera que los jóvenes vuelvan a las calles. Además tienen previsto otras dos jornadas de protesta el 24 y 31 de octubre.