Tegucigalpa, 3 nov (PL) El presidente del Tribunal Supremo Electoral (TSE) de Honduras, David Matamoros, reconoció hoy que esa institución pagó tributos a bandas delictivas para que estas permitieran un ensayo de los comicios presidenciales del 24 de noviembre próximo.
La información, revelada este domingo por el periódico Proceso Digital, se suma a otras denuncias recientes acerca de que varios aspirantes presidenciales se han visto obligados a entregar dinero a las llamadas «maras» en las principales ciudades del país para garantizar la seguridad en las concentraciones políticas con sus seguidores.
Incluso en algunos sitios las pandillas establecen un horario obligatorio para que los candidatos puedan desarrollar sus actividades proselitistas.
El candidato presidencial por el Partido Liberal, Mauricio Villeda, expresó a Proceso que lo grave es que el estado de sitio que hay en barrios y colonias no lo imponen las autoridades policiales hondureñas, sino las bandas delictivas.
Sin embargo, autoridades policiales afirmaron que a pesar de estos inconvenientes, la seguridad está garantizada para los comicios generales del 24 de noviembre, en los que se prevé la participación de más de cinco millones de electores.
De acuerdo con estadísticas oficiales, Honduras es el país de mayor índice de violencia en Latinoamérica y el Caribe, con una tasa de 91,6 homicidios por cada 100 mil habitantes