Moscú, 11 ene (PL) Una empresa rusa adjunta al Ministerio de Interior anunció hoy la licitación para el diseño de un detector remoto de explosivos, en prevención de atentados terroristas suicidas, como los ocurridos en el último trimestre de 2013 en este país.
Con un financiamiento de más de 39 millones de rublos, alrededor de un millón 182 mil dólares, el aparato deberá construirse en tres años, destinado a detectar explosivos y los llamados cinturones de suicidas a 10 metros de distancia, con una probabilidad de detección en el rango de 98 por ciento, comentó el canal de televisión TV Center.
La unidad científica-productiva Técnica Especial y comunicaciones, a cargo de la licitación por el Ministerio de Interior, anunciará los resultados del concurso el 12 de febrero y la fecha máxima para cumplir el pedido es el 15 de noviembre de 2016.
Tres atentados dinamiteros ocurrieron en la ciudad rusa de Volgogrado, dos de éstos el 29 y 30 de diciembre pasado, con saldo total de 34 muertos y más de 70 heridos, causados por suicidas. El anterior acaeció el 21 de octubre en un ómnibus de pasajeros, también con víctimas mortales.
De acuerdo con una nota divulgada en el sitio de la entidad, el equipo deberá emitir una señal de alarma acústica y visual ante la detección de artefactos explosivos y funcionará por el principio de un radar de localización de doble frecuencia no lineal.
Se supone que el mecanismo de detección no rebase los cinco minutos y emita la señal en 0,5 segundos, según las condiciones exigidas en la licitación. Por otra parte, el ingenio deberá estar capacitado para diferenciar cualquier tipo de artefacto explosivo de aparatos electrónicos comunes.
En Rusia, según informativos, existen más de una decena de modelos de radio detectores no lineales que difieren en sus características técnicas y capacidad de detección.
Un sistema de detección remota de explosivos, denominado Standex, fue creado el pasado año por un equipo de ingenieros de Rusia y de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), luego de un cuatrienio de trabajo conjunto.
Mediante escáner de microonda y un sistema de control, Standex localiza tanto los artefactos colocados en bolsos y otros envases como los pegados al cuerpo, informó entonces el canal internacional Rusia Today.
En tiempo real, esos dispositivos reportan cualquier anomalía en la composición molecular de los objetos y personas visibles, mientras un programa informático regula todos los sensores, centraliza y combina los datos recobrados. La prensa rusa comentó que no queda claro en la comunicación si el pedido del Ministerio de Interior es una prolongación de ese invento, el cual está ahora en una etapa de ensayo.
De momento, tras los atentados de diciembre, las autoridades rusas redoblaron las medidas de seguridad y los controles en los sitios de gran concentración de personas y en el transporte público, tanto terrestre como subterráneo.
En especial se fortificó el sistema de seguridad en las ciudades del sur de la Federación próximas al balneario de Sochi, a orillas del mar Negro, sede en febrero de los Juegos Olímpicos de Invierno.