Buenos Aires, 12 ene (PL) La periodista, escritora y politóloga argentina Stella Calloni alertó sobre los intentos en Latinoamérica de lo que calificó de golpes suaves, como las sediciones policiales sufridas en Ecuador, Bolivia y en Argentina particularmente el mes pasado.
En una larga entrevista que reproduce este domingo el diario Tiempo Argentino, Calloni, autora de varios libros de investigación como «Los años del Lobo: Operación Cóndor (1999), también llamó a descolonizar la cultura y enfrentar el periodismo mentiroso.
Respecto a las protestas de cuerpos policiales y los saqueos desatados al unísono, en los que participaron o propiciaron agentes hoy bajo investigación, en varias provincias argentinas en diciembre, Calloni no duda en calificar esos violentos episodios de vandalismo golpista.
«Me dicen conspirativa, pero a la larga se demuestra que lo que digo lo cual comparten muchos otros analistas es cierto,» señaló.
Rememoró que esos sucesos acontecieron precisamente cuando el país celebraba 30 años de la restitución de la democracia, entonces estalla la sedición policial, saqueos coordinados a comercios y casas particulares, mientras la televisión hegemónica reproducía insistentemente escenas de caos y violencia.
«Hoy se pueden abordar en perspectiva, y aunque cualquier conclusión definitiva es todavía prematura, preguntarse si Argentina atravesó un conato desestabilizador es cualquier cosa menos descabellado», recalca Calloni.
La analista estimó que es impropio ver esos acontecimientos violentos bajo la óptica de un conflicto social. «Es falso desde todo punto de vista. Eso es la típica contrainsurgencia, yo estudio desde hace años esos métodos», recalcó.
En su análisis, la investigadora advirtió que se desplegaron técnicas de contrainsurgencia, con las policías y los grupos delincuenciales que les responden ejecutando en el territorio vandalismo golpista y caos antidemocrático.
Eso es parte de lo que denominó golpes suaves, que «son las formas ilegales, los métodos de shock, las maneras de crear caos, es decir, han hecho de todo a lo largo de todos los años que hemos vivido dependiendo de este imperio, que es un imperio», afirmó en alusición a Estados Unidos.
Calloni sustentó su hipótesis en sucesos parecidos registrados en Bolivia, Ecuador, Honduras y Paraguay, donde se pudo documentar la responsabilidad en las acciones sediciosas de agencias estadounidenses y misteriosas fundaciones que estas suelen usar de pantalla en la región contra gobiernos que no son del agrado de Washington.
Ejemplificó en el caso particular de Bolivia donde hubo una rebelión policial contra el presidente Evo Morales, supuestamente por aumento salarial, cuando después se descubrió que tenían dinero y que se comunicaban con la embajada de Estados Unidos.
«Eso está establecido, totalmente documentado en Bolivia, y le quisieron hacer ese golpe a Morales en el mismo momento que le dieron el golpe parlamentario a Fernando Lugo en Paraguay», remarcó.