Impulsar y fortalecer el patrimonio cultural de los pueblos originarios, y con ello el desarrollo económico de sus regiones y comunidades, es un compromiso para el INAH, expresó Teresa Franco, directora general del Instituto Nacional de Antropología e Historia, al inaugurar anoche en el Museo Nacional de Historia, Castillo de Chapultepec la exposición Norte Infinito. Pueblos indígenas en movimiento.
Acompañada por Nuvia Mayorga Delgado, directora general de la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI), y Salvador Rueda Smithers, director del recinto, la titular del INAH resaltó que la muestra inaugurada en la Sala de Exposiciones Temporales del MNH revela la riqueza de las 13 culturas indígenas originarias del norte del país, que son motivo del montaje.
Durante su participación, la titular del INAH realzó que este viernes se celebra el Día Internacional de la Lengua Materna, y comentó que de los 68 pueblos originarios con que cuenta el país, 13 con sus respectivas lenguas y culturas habitan el extenso norte de México. “Se trata de pueblos de origen seminómada que han pervivido a lo largo del tiempo y que hoy, integrados a la modernidad, viven para conservar los rasgos peculiares de su etnicidad”.
Conformada por 207 piezas provenientes del Acervo de Arte Indígena de la CDI, la exhibición ─gracias a la curaduría de Octavio Murillo Álvarez, subdirector de Conservación y Resguardo de la CDI─ desvela aspectos de la vida cotidiana y ritual de estas culturas, y llama a la reflexión sobre estos pueblos originarios entre los cuales hay algunos cuya lengua está en peligro de extinción.
Norte Infinito… tiene como propósito “reflexionar sobre lo que significaría la pérdida de estas identidades ancestrales cuyas expresiones forman parte de nuestro rico y amplio patrimonio cultural, clave del ser de los mexicanos y sustento de la nación plural, multiétnica y diversa que somos”, dijo Teresa Franco.
La directora general del INAH hizo un reconocimiento a la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas, por ser un puente virtuoso de todos los mexicanos con lo más profundo de nuestra esencia y raíz étnica y cultural.
La gastronomía, el arte, la música, la cestería, los juegos, la vestimenta y la danza, así como la participación en la vida moderna de las culturas que viven en Baja California, Sonora, Sinaloa, Chihuahua y Coahuila, son mostrados en la exhibición cuya museografía evoca desde los colores del desierto hasta la monumentalidad de la sierra del norte de México.
Teresa Franco anunció una serie de actividades en torno a la muestra, entre las que sobresale un ciclo de conferencias con especialistas del INAH y de la CDI, un ciclo de cine que dará inicio con la película Raíces, de Benito Alazraki, así como la proyección de documentales recientes producidos por ambas instituciones.
Resaltó además la relevancia del libro Etnografía de los pueblos indígenas en el nuevo milenio, coeditado por el Instituto Nacional de Lenguas Indígenas, el Instituto Sonorense de Cultura y el INAH; el video Entre la oscuridad y la gloria, que refleja la Cuaresma de la Cultura Mayo, y los proyectos de rescate de la pintura rupestre de petroglifos de Paquimé.
“El patrimonio representado en esta muestra viene de miles de años atrás, se renueva y potencia día con día, afianzado en las raíces de su herencia y de su historia. Nos da identidad y sentido de unidad como nación en el marco de nuestra diversidad. Un patrimonio que habla de culturas vivas y actuantes”, concluyó.
Por su parte, Nuvia Mayorga Delgado, directora general de la CDI, explicó que dentro del Plan Nacional de Desarrollo, el Presidente Enrique Peña Nieto ha propuesto a esta administración rescatar la cultura indígena. “Por eso en la CDI tenemos un programa específico para realizar este tipo de exposiciones, en esta ocasión dedicada al norte del país, y más adelante nos abocaremos al centro y al sur”.
La titular de la CDI informó que la exposición será itinerante para que pueda ser apreciada en todo el territorio nacional. “Traeremos a grupos de niños indígenas del centro y del sur del país, para que conozcan cómo viven los indígenas del norte y con ello fortaleceremos los lazos existentes”.
Posteriormente, un grupo de danzantes y músicos mayos, provenientes de Sonora, interpretaron fragmentos de la Danza del Venado y Pascola, así como la ejecución de “paradas musicales” con instrumentos de origen prehispánico y colonial: violines, arpa, tambor de agua, raspadores y flauta.
Kiliwa (ko’lew), pápago (tohono o’odham), kikapú (kikaapoa), cucapá (es-pei), pa ipai (akwa’ala), kumiai (ti’pai), pima (o’ob), seri (conca’ac), mayo (yoreme), guarijío (makurawe), tepehuán del norte (o’damí), yaqui (yoeme) y tarahumara (rarámuri), son los pueblos que conforman esta riqueza cultural que se busca revalorar.
Norte Infinito. Pueblos indígenas en movimiento está conformada por diversos módulos. El introductorio es una aproximación a la diversidad cultural de México en general y del norte en particular. Forjando destinos remite a los pueblos de la región; Norte multicultural expone los aspectos lingüísticos y geográficos de las culturas en cuestión; Riqueza en peligro de extinción busca sensibilizar al público sobre la pérdida de las culturas y los idiomas originarios.
Vida cotidiana describe el día a día de las comunidades indígenas; Arte Indígena desvela la pluralidad de expresiones artísticas de estos pueblos; Cosmovisiones y rituales introduce al público a la complejidad de las mitologías y de los ritos más emblemáticos para los pobladores del norte del país, y Desafío en movimiento es un análisis sobre la situación actual y las perspectivas a futuro de estos 13 pueblos originarios del norte de México.
La muestra concluirá en junio próximo en la Sala de Exposiciones Temporales del Museo Nacional de Historia, Castillo de Chapultepec.