Asunción, 7 jun (PL) La fiscal paraguaya de la Niñez y Adolescencia María Vera abrió de oficio una investigación contra el sacerdote argentino Carlos Urrutigoity por acusaciones de supuestos abusos contra menores de edad.
Las imputaciones a Urrutigoity desataron una verdadera crisis en la estructura de la jerarquía católica pues provinieron del Arzobispo de Asunción, Pastor Cuquejo, y tuvieron de respuesta duros planteamientos en su contra del obispo del departamento de Alto Paraná, Rogelio Livieres.
Livieres, bajo cuya dirección labora el acusado en Ciudad del Este, capital de ese departamento, decidió rechazar los alegatos del Arzobispo y asegurar que éste debió ser más prudente pues, hace cinco años, estuvo a punto de ser expulsado por acusaciones de homosexualidad.
La fiscal Vera dijo que indagará si en Paraguay hay alguna victima del religioso señalado por Cuquejo y en caso negativo, remitirá los antecedentes a Asuntos Internacionales del Ministerio Público porque entiende existen acusaciones contra él en otros países.
Mientras tanto, el obispo Livieres negó que se encontrara en disposición de pedir excusas al Arzobispo de Asunción mientras éste no se retracte de sus imputaciones al sacerdote argentino.
Anoche, fuentes de la iglesia habían señalado que una gestión del tío de Livieres allanó el camino para una conciliación, pero la versión fue desmentida totalmente por el obispo de Alto Paraná, manteniendo así vigente sus duros criterios sobre Cuquejo al cual calificó de mala persona.
Así las cosas, se anuncio una próxima reunión de la Conferencia Episcopal que tratará de apagar el escándalo y de paso seleccionar al sustituto del Arzobispo quien debe retirarse de su cargo el próximo mes de septiembre.
Fiscalia paraguaya investigará a sacerdote acusado de pederasta
