Legisladores del Partido Acción Nacional presentaron un punto de acuerdo para solicitar al Ejecutivo federal y al Gobierno de Quintana Roo se coordinen y realicen acciones que garanticen la conservación y preservación del área Natural Protegida de Flora y Fauna denominada Yum-Balam en esa entidad.
Asimismo, también pidieron a la Procuraduría Agraria presentar un informe relacionado con la asamblea realizada por algunos de los ejidatarios de la Isla de Holbox, efectuada el pasado 1° de junio en la cabecera municipal de Lázaro Cárdenas, en Quintana Roo para saber si cumplió con los requisitos establecidos en la Ley Agraria.
Los senadores del PAN recordaron que Holbox es una isla mexicana ubicada en el extremo norte del estado de Quintana Roo, zona que cuenta con una gran diversidad de flora y fauna y constituye un refugio para múltiples especies en peligro de extinción, por lo que los habitantes de la isla y sociedad civil han protegido la zona durante los últimos años.
Holbox forma parte del área de Protección de Flora y Fauna denominada Yum-Balam, declarada desde el 6 de junio de 1994 como área de protección. El proyecto para el desarrollo de infraestructura turística en la zona inició en 2006, año en el que la población del lugar manifestó el rechazo al proyecto debido a la afectación ambiental que provocaría la construcción de cualquier complejo turístico.
De acuerdo con las consideraciones de la proposición, el empresario Fernando Ponce García es el propietario de la empresa Bepensa, la cual embotella el producto de la compañía Coca-Cola, quien también ofrece servicios de investigación y consultoría del medio ambiente, así como encabeza el grupo de empresarios que constituyen la empresa mexicana Península Maya Developments, S.A. de C.V.
Según información dada a conocer por los medios de comunicación y por la propia empresa Península Maya Developments, en sociedad con la Inmobiliaria ARA, planean desarrollar un complejo turístico llamado “La Ensenada”, el cual contaría con 93.21 hectáreas de las 980.05 hectáreas que tiene la Isla de Holbox, es decir, un 9.51 por ciento de la superficie total, conservando en su estado natural 886.84 hectáreas, es decir un 90.49 por ciento.
Las obras se ubicarían en la llamada «Isla Grande» de Holbox, a la cual sólo se puede acceder por medio de embarcaciones o en helicóptero. Dicho proyecto contempla construir tres hoteles en una superficie de 8.65 hectáreas, por lo menos 875 villas y condominios para bienes raíces en 114.57 hectáreas, un centro comercial en 1.44 hectáreas, canales de agua en 34.72 hectáreas, además de caminos y servicios, un helipuerto, y dos campos de golf, que se ubicarían sobre una superficie de 183.24 hectáreas.
En este sentido, se debe recordar que además de la actual disputa ambiental existe una disputa agraria, pues en 2009 nueve ejidatarios que se oponen a la construcción del desarrollo turístico “La Ensenada”, presentaron una demanda en contra de la empresa Península Maya Developments por irregularidades en el procedimiento para la compra-venta de sus ejidos. El tribunal agrario dictaminó, en junio de 2010, a favor de los ejidatarios para que recuperaran sus tierras. Los empresarios entonces llevaron el caso a la Suprema Corte de Justicia de la Nación, la cual otorgó en noviembre de 2012 un amparo a la empresa, con el que se cancela el dictamen del tribunal agrario que le permitía a los ejidatarios recuperar sus tierras. Para que el proyecto “La Ensenada” se llevara a cabo faltaban solamente los acuerdos entre ejidatarios y la aprobación de la Semarnat.
Según diversos medios de comunicación, la asamblea ejidal se celebró en un sitio diferente al citado en la convocatoria oficial para distraer a los ejidatarios originales y evitar que asistieran a la asamblea y así fueran capaces de denunciar cualquier irregularidad en ésta, además se montó un cerco policiaco en el restaurante «La Normita», donde oficialmente se llevaría a cabo la asamblea.
Los comuneros fueron agredidos con gas lacrimógeno y piedras por elementos de Seguridad Pública de Quintana Roo, por instrucciones del general Bibiano Villa, mientras la asamblea “verdadera” se celebraba en la cabecera municipal de Lázaro Cárdenas, de acuerdo con versiones periodísticas.
En esa asamblea participaron “ejidatarios yucatecos”, mismos que son acusados de ser supuestos prestanombres de los desarrolladores del proyecto por parte de los ejidatarios originales de Isla Holbox. Nirvardo Mena Villanueva, comisario ejidal de Holbox, declaró que los “ejidatarios yucatecos” consiguieron el apoyo de funcionarios del gobierno estatal porque se les prometieron tierras dentro del proyecto “La Ensenada”.
Por todas estas declaraciones, la asamblea se denunció como ilegal y decenas de pobladores y ejidatarios se han manifestado contra el despojo de terrenos de los verdaderos propietarios, señalaron los legisladores de Acción Nacional.
El punto de acuerdo fue signado por los senadores panistas Mariana Gómez del Campo Gurza, Rosa Adriana Díaz Lizama, Silvia Guadalupe Garza Galván, Laura Angélica Rojas Hernández, Jorge Luis Lavalle Maury, Francisco García Cabeza de Vaca, Daniel Ávila Ruiz y Héctor Larios Córdova, así como los senadores del PRD Alejandro Encinas Rodríguez y Zoé Robledo Aburto, y por los diputados Juan Pablo Adame Alemán, Marcos Aguilar Vega, Fernando Belauzarán Méndez y Fernando Zárate Salgado. La proposición se turnó a la Tercera Comisión para su análisis y dictamen correspondiente.