Obama reconoce alto costo del sistema de cuidados a la niñez en EE.UU

Washington, 21 jun (PL) El presidente estadounidense, Barack Obama, reconoció hoy el alto costo de las guarderías infantiles y centros similares en su país, muchas veces fuera del alcance de los trabajadores, y llamó a cambiar esta situación de inmediato.
En su habitual intervención sabatina por radio e Internet, el mandatario dijo que la mayoría de los padres no pueden darle a sus hijos la educación temprana y de calidad a la que aspiran, y a duras penas buscan a toda costa un lugar seguro para que sus hijos estén mientras ellos trabajan.
Obama añadió que la mayoría de los trabajadores aspiran a tener más flexibilidad en sus puestos de labor y disponer de tiempo libre para intercambiar con los maestros o trabajar desde casa si se enferma alguno de sus hijos.
«Cuando los empleados tienen acceso a ese tipo de acuerdos no sólo consiguen ser más felices en sus trabajos, sino que son más productivos, lo que ayuda a reducir el ausentismo y el número de trabajadores que dejan sus empleos, lo cual es bueno para los dueños de negocios», añadió.
Afirmó que muchas personas trabajadoras y talentosas se ven obligadas a dejar sus puestos porque tienen que escoger entre estos y el cuidado de sus familiares, «lo cual es un serio problema a resolver si queremos que nuestras empresas sean competitivas en la economía global».
El gobernante dijo que muy pocos estados de la Unión «han actuado por su cuenta para dar licencias pagadas a algun miembro de la familia, pero esto debe estar disponible a nivel nacional, porque cada estadounidense debe tener la posibilidad de ayudar a algunos de sus seres queridos que lo necesiten».
Obama lamentó que Estados Unidos sea uno de los tres países en el mundo -junto a Omán y Papua Nueva Guinea- que no ofrecen una licencia retribuida de maternidad a nivel nacional y afirmó que es el momento de cambiar esa situación.
Estados Unidos carece de una legislación a nivel federal sobre estos permisos de maternidad, los cuales son otorgados por cada compañía y entidad, y esto implica que muchas madres retornen rápidamente a trabajar después del parto o apenas disfruten de unas 12 semanas sin sueldo.