Washington, 24 jun (PL) El presidente estadounidense, Barack Obama, se halla hoy bajo presión del Congreso para que justifique el uso de la fuerza militar como solución a la crisis en Iraq.
Los demócratas en la Cámara de Representantes manifestaron este martes su temor de que Iraq se convierta en otro Vietnam, en alusión a la desastrosa agresión estadounidense contra esa nación asiática.
El presidente del Caucus Demócrata en ese foro, el legislador Xavier Becerra (California), dijo que presionan a la Casa Blanca para que justifique el posible uso de la fuerza militar para frenar la creciente insurgencia en territorio iraquí.
Las aproximaciones del Congreso ocurren en momentos en que el Pentágono negó este martes informaciones sobre un supuesto ataque con aviones no tripulados o drones estadounidenses en una localidad iraquí en la frontera con Siria en poder de los grupos del Estado Islámico de Iraq y el Levante (EIIL).
El contraalmirante John Kirby, vocero castrense, desmintió la acción y aseguró que los informes de prensa son falsos y que no se ha realizado tal ataque.
El secretario de Estado, John Kerry, de visita en Iraq, sugirió esta semana que el gobierno está a punto de lanzar ataques contra los militantes sunitas del EIIL, que intentan derrocar al gobierno de Bagdad.
Según Becerra un ataque con drones podría ser el primer paso para un compromiso mayor a poco menos de tres años de que las fuerzas estadounidenses se retiraron de Iraq.
Puntualizó que los legisladores esperan por una reunión informativa bipartidista con funcionarios de la administración para explicar la necesidad de tal acción en lo que respecta a los intereses estadounidenses.
Los parlamentarios, de acuerdo con Becerra, quieren saber si hay evidencias de que se pueda formar un gobierno de unidad nacional en Iraq, cual es el objetivo final de la administración en la aplicación de la fuerza y quieren saber, añadió, por qué una intervención militar es en el mejor interés de Estados Unidos.
La semana pasada Obama negó que soldados estadounidenses fueran a regresar a combatir en Iraq. No obstante, un creciente número de legisladores de su partido quieren garantías más fuertes de que una participación limitada en Iraq, incluyendo ataques aéreos, no es el primer paso para el envío de unidades militares.
Obama bajo presión sobre uso de la fuerza en Iraq
