Suspenden temporalmente rescate de mineros hondureños

Tegucigalpa, 5 jul (PL) La labor de rescate de ocho mineros atrapados por un derrumbe fue suspendida la noche del viernes por el peligro que representa para los socorristas, informó hoy la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco) de Honduras.
El responsable de Copeco, Moisés Alvarado, explicó que ocurrieron nuevos desprendimientos de arcilla y rocas en el interior de la mina artesanal y el panorama no es alentador para los que permanecen en el área de desastre.
En este momento no se dan las condiciones para seguir adelante y no pueden poner en peligro y riesgo la vida de los expertos de Honduras, El Salvador y Guatemala participantes en las labores de rescate, puntualizó.
La víspera pudieron ser rescatados tres de los 11 mineros que el miércoles quedaron atrapados por un derrumbe en la profunda mina artesanal de San Juan de Arriba de la comunidad de El Corpus, a 160 kilómetros al sur de esta capital.
En esa jornada, los socorristas hondureños y salvadoreños fueron reforzados por expertos guatemaltecos e intensificaron la angustiosa búsqueda de los ocho mineros atrapados por el derrumbe, cuya ubicación exacta aún no fue determinada.
Un bombero participante en el salvamento e identificado como Marco Artica reveló que los tres rescatados estaban protegidos por un techo de madera que los mantuvo vivos, pero al parecer a los otros les cayeron encima toneladas de tierra y piedra.
Los mineros rescatados por un estrecho boquete abierto entre rocas relataron al Conadeh que el derrumbe ocurrió después que detonaron 10 cartuchos de dinamita dentro de la mina.
Los familiares insisten en que no se puede perder la esperanza y exigen que saquen esos cuerpos de cualquier forma aunque sea para llevarlos a un cementerio.
Aquí se conoció que este sábado llegan experimentados especialistas enviados por Chile donde en 2010 ocurrió el rescate más famoso de la historia al sacar vivos a 33 mineros atrapados a unos 720 metros de profundidad en la mina San José.
En la zona montañosa donde ocurrió el desastre hondureño hay unas 80 minas artesanales con profundos túneles, y se calcula que en ellas trabajan de cuatro a cinco mil personas de las empobrecidas comunidades rurales vecinas.

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