(ng) A la Gioconda no hay con qué darle: como el año anterior, en 2013 el Louvre, de París —que aloja el célebre cuadro de Leonardo Da Vinci— es el museo más visitado del mundo. Atravesaron sus puertas 9,334 millones de personas. El más visitado y eso que la entrada cuesta entre 12 y 16 euros y eso que el número de sus visitantes viene bajando: el de 2013 es un 4% menor que el de 2012, según un informe que inauguró la consultora estadounidense AECOM. En rigor, el estudio de AECOM no se hizo en todo el mundo sino en Estados Unidos, Europa y la región de Asia-Pacífico.
Al Louvre le sigue el Museo Nacional de Historia Natural, de Washington, con 8 millones de personas y el Museo Nacional de China, en Beijing, con 7,4 millones. En cuarto lugar está el Museo Nacional del Aire y del Espacio, también en Washington, Estados Unidos y el quinto es el British Museum, joya londinense donde está, por ejemplo, una parte de los frisos del Partenón de Atenas. Pasaron por ahí, en 2013 6,7 millones de personas, es decir, un 20,2 por ciento más que un año antes. Estos cuatro museos son de entrada gratuita.
En sexto lugar entra el elegante Metropolitan de Nueva York (6,2 millones de visitantes en 2013) y pisándole los talones la National Gallery de Londres. Los Museos Vaticanos —que albergan un sinfín de maravillas, en un recorrido que lleva multitudes todos los días a la Capilla Sixtina— alcanzaron los 5,4 millones de personas.
Los siguientes dos, son museos de Ciencias Naturales. El de Londres, con 5,2 millones de visitantes y el Americano, de Nueva York, con 5 millones.
La Argentina no entra en el estudio de AECOM, pero no falta gente munida de camaritas que salga a recorrer salas de exhibición. Según el Ministerio de Cultura porteño, el año pasado 1.947.000 personas fueron al Centro Cultural Recoleta, que agrupa varias salas y actividades de distinto tipo. Al Malba —donde hubo colas para ver la muestra de Yayoi Kusama— llegaron 410.000 personas. Y el Museo Nacional de Bellas Artes recibió 350.000 personas: 75.000 fueron a ver la muestra de la fotógrafa Adriana Lestido y 55.000, la del colombiano Fernando Botero.