México, 11 jul (PL) Los cuatro paquetes de legislaciones secundarias sobre energía quedarán listos hoy para recibir la votación de comisiones del Senado mexicano, tras ser analizados por esos grupos en lo general y lo particular.
La víspera, las agrupaciones de Energía y Estudios Legislativos Primera iniciaron la discusión del último dictamen, el cual expide la Ley de Órganos Reguladores Coordinados en Materia Energética y modifica la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal.
Una vez agotada la discusión de ese texto, que también contiene la propuesta sobre la Ley de la Agencia Nacional de Seguridad Industrial y de Protección al Medio Ambiente del Sector Hidrocarburos, las iniciativas podrán ser llevadas a sufragio luego de 48 horas.
Según anunció el senador, David Penchyna, se convocará a una nueva reunión el próximo lunes para que las diferentes bancadas emitan su voto en torno a estas propuestas, que comprenden un total de 14 normativas complementarias.
De aprobarse en comisiones, como está previsto, las leyes secundarias de la reforma que permite la participación privada en el sector, se convocará a un periodo extraordinario a fin de enviar las minutas al pleno senatorial el jueves venidero.
En referencia al último de los paquetes, el parlamentario del gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI), Miguel Chico, expuso que la conformación de una nueva arquitectura institucional del área energética tiene alcances trascendentales.
Según el legislador, fortalecerá la seguridad en el ramo y aumentará la competitividad de las empresas productivas del Estado.
Pero la senadora Dolores Padierna, del Partido de la Revolución Democrática (PRD), cuestionó los alcances de los nuevos órganos reguladores, al considerar que tendrán un enorme poder sobre el desarrollo del sector y, en varios asuntos, superarán a la Secretaría de Energía.
De acuerdo con el PRI y los partidos Acción Nacional y Verde Ecologista de México, la reforma energética impulsará el desarrollo económico del país y traerá importantes beneficios para la población.
Pero el PRD y otras fuerzas de izquierda como el Partido del Trabajo la consideran una entrega de los recursos nacionales a manos foráneas, que solo dará ventajas a las grandes compañías.