Con el fresado y levantamiento de asfalto de las calzadas El Rosario y de los Ángeles, Avenida 16 de Septiembre, calle Centlapatl y cerrada El Rosario en la colonia San Martín Xochináhuac, empezaron en Azcapotzalco los trabajos de reencarpetado y sustitución de banquetas y guarniciones en 10 colonias, con recursos federales del Ramo 23.
Acompañado de vecinos y directores de área, el Jefe Delegacional Sergio Palacios Trejo dio el banderazo de salida a la maquinaria pesada y 20 trabajadores, que durante cuatro semanas cambiarán 10 mil 600 metros cuadrados de asfalto, colocarán 21 mil metros cuadrados de banquetas y perfilarán ocho mil 700 metros lineales de guarniciones, obras con una inversión de ocho millones de pesos.
“Conseguimos un recurso adicional para la delegación y consideramos importante aplicarlo en lo que ustedes nos habían solicitado. Además de la obra, nos coordinaremos con la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal para evitar daños provocados por el paso de transporte pesado”, comentó Palacios Trejo.
El Ramo 23 es una partida otorgada por la Secretaría de Hacienda a las 32 entidades del país, que se invierte en rubros como la rehabilitación de infraestructura urbana, impulso y difusión de la cultura o apoyo al deporte, entre otros. Los recursos son cedidos a los municipios o delegaciones para aplicarlos en las necesidades de la zona territorial.
Las colonias de Azcapotzalco intervenidas por esta vía son Patrimonio Familiar, Reynosa Tamaulipas, San Marcos, Nueva España, Plenitud, Pasteros, Porvenir, Coltongo, Aguilera y San Martín Xochináhuac. Estas zonas contarán con renovadas vialidades secundarias y locales, así como banquetas y guarniciones.
“Nos da gusto que se haya decidido trabajar en estas calles, porque el paso diario de tráileres las ha dañado severamente y están llenas de hoyos y baches”, comentó Verónica Osnaya, coordinadora del Comité Ciudadano de San Martín Xochináhuac.
Los vecinos se mostraron complacidos con los trabajos, ya que por el paso de vehículos pesados las banquetas y guarniciones lucen quebradas, rotas y con irregularidades, por lo que los transeúntes debían bajar a la vía pública para transitar por las calles, poniendo en riesgo su integridad física.
“Yo tengo mi tía que usa silla de ruedas y si nos van a cambiar las banquetas será de mucha ayuda para nosotros y muchos vecinos más que se encuentran en la misma situación”, señaló Genoveva Martínez, vecina de la colonia que habita en Cerrada El Rosario.