El efecto bumerán en la campaña electoral de Uruguay

Por Jorge Luna

Montevideo, 7 ago (PL) La estrategia de uno de los candidatos presidenciales de pretender representar una fuerza joven, espontánea y alegre, podría resultarle contraproducente en los comicios del próximo 26 de octubre.
Lo que algunos describen como el efecto bumerán podría instalarse en la campaña del postulante del opositor Partido Nacional (PN), Luis Lacalle Pou (40), inmerso en la ya tensa competencia con el expresidente Tabaré Vázquez (2005-2010), favorito en todas las encuestas.
El tema de la renovación generacional no figura oficialmente en su discurso electoral, pero sí asoma con frecuencia.
La semana pasada, Lacalle Pou, hijo del expresidente Luis Alberto Lacalle (1990-1995), sorprendió a los uruguayos al ejecutar, en un poste en plena vía pública, una «bandera» a modo de burla a la candidatura oficialista.
La circulación masiva de la foto con su cuerpo en posición horizontal y paralelo al piso, provocó críticas en las redes sociales, por lo que Lacalle Pou optó por pedir disculpas, pero lo hizo en tono irónico. Eso fue peor.
El grupo Redes Frenteamplistas, que apoya a Vázquez, convocó a un «banderazo»: «Ya que Lacalle Pou quiere hacer bandera y no hay ninguna más linda que la nuestra, saquémosla junto con la uruguaya, y subamos fotos a las redes sociales».
Otro respuesta la dio hoy el viceministro de Economía, Jorge Polgar (46) al hacer también una bandera en el centro de Montevideo.
Esta semana, Lacalle Pou propuso crear un «consejo de ancianos», conformado por los expresidentes, entre los cuales incluyó a Vázquez (74), quien se encuentra en plena actividad política.
La propuesta tampoco cayó bien en medios políticos uruguayos y varios directivos del Frente Amplio la rechazaron.
El senador oficialista Enrique Rubio dijo que esa línea le resultará un «bumerán», pues intenta descalificar a su adversario utilizando la cuestión de la edad. Por ese lado, en Uruguay no se va muy lejos, advirtió, dijo.
Su colega en el Senado, Rafael Michelini, también del Frente Amplio, opinó que la propuesta de Lacalle Pou es una «prueba irrefutable de que él no puede gobernar».
El candidato oficialista a la vicepresidencia, Raúl Sendic (hijo), con 51 años de edad, rechazó la propuesta de Lacalle Pou y dijo: «no voy a entrar en esta forma chistosa de hacer política, que a los uruguayos les cae mal».
Aunque algunos estiman que la publicitada juventud de Lacalle Pou constituye un activo de su campaña, otros lo ven como un «punto débil». Ambos grupos esperan, ahora, conocer los resultados de las próximas encuestas.

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