Brasilia, 11 ago (PL) La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, calificó hoy de gravísimo la intenciones de la oposición de politizar todos los asuntos relacionados con la petrolera estatal Petrobras.
Se trata de la mayor y más importante empresa del país que debemos resguardar y espero que no se haga política con esta entidad, resaltó Rousseff en entrevista al grupo RBS, del estado de Río Grande Sur.
Tras defender a la máxima dirigente de Petrobras, Graza Foster, por sus meritos y logros en el trabajo, descartó que esta persona cometiera irregularidades al frente de esta compañía.
Según el Tribunal de Cuentas de la Unión (TCU), la petrolera registró un perjuicio de 762 millones de dólares por la compra en 2006 de la refinería Pasadena, en Estados Unidos.
Ante esta situación, el TCU decidió bloquear los bienes de 11 directores de la empresa, a los cuales consideró como responsables de las irregularidades de esa negociación, que perjudicó las arcas de Petrobras.
La mandataria rechazó realizar algún comentario sobre la decisión del TCU, pero destacó que la petrolera se encuentra en una fase de crecimiento irreversible, con un incremento continúo de su producción, debido a las extracciones de crudo en la zona de pre-sal, ubicada en aguas profundas del Océano Atlántico.
Al igual que Rousseff, el secretario general de la Presidencia de Brasil, Gilberto Carvalho, alertó sobre las pretensiones de la oposición de usar supuestas anomalías en la empresa petrolera en sus campañas políticas.
«Nos parece muy malo, negativo, usar, desmerecer, rebajar a Petrobras, un patrimonio que no es del gobierno; es un patrimonio nacional», aseveró Carvalho.
Según el balance del primer semestre del este año, la principal compañía del país registró ganancias por 10 mil 352 millones de reales (cuatro mil 580 millones de dólares), que representaron, empero, una caída de 25 por ciento en sus rendimientos con relación al mismo período del 2013.
Politizar Petrobras es grave, dice presidenta brasileña
