Perdimos un gran brasileño, dice Rousseff sobre Campos

Brasilia, 13 ago (PL) Brasil entero está de luto, perdimos hoy a un gran ciudadano, a Eduardo Campos, muerto al caer el avión en que viajaba en la ciudad de Santos, estado de Sao Paulo, afirmó la presidenta del país, Dilma Rousseff.
En un comunicado oficial, la mandataria decretó tres días de duelo oficial y se mostró «tristísima» por el deceso del aspirante a la jefatura del Estado por el Partido Socialista Brasileño (PSB).
Rousseff expresó gran consternación por la defunción del socialista de 49 años de edad, de quien -dijo- desde joven luchó en el buen combate de la política como diputado federal, ministro y gobernador de Pernambuco.
El PSB formó parte de la coalición de gobierno de la actual jefa de Estado hasta mediados de 2013, cuando decidió apartarse para preparar la candidatura a la presidencia de su líder.
Tercero en la intención de votos, según la más reciente encuesta, Campos se pronunció por mantener los programas sociales del actual Ejecutivo, reducir los impuestos a los pobres y aumentar los de los ricos, y pasaje gratis en el transporte para los estudiantes de las escuelas públicas.
Nacido en 1965, el político brasileño fue diputado estadual y federal, secretario de Hacienda, y ministro de Ciencia y Tecnología de 2003 a 2006 durante el gobierno de Luz Inacio Lula da Silva.
Hasta el momento se desconocen las causas de que el avión Cessna 560XL, en el cual viajaba acompañado de otras seis personas, se precipitara a tierra y cayera sobre tres casas y un salón de entrenamiento.
Testigos de este hecho, entrevistados por canales de televisión brasileños, señalaron que vieron una aeronave incendiada desplomarse sobre varias viviendas de un barrio de la ciudad de Santos.
Hubo después una explosión y los restos del Cessna se dispersaron junto con los escombros de las viviendas destruidas, destacó un residente de esa localidad al indicar que observó algunos cadáveres, entre ellos el del candidato presidencial socialista.
El PSB tiene ahora un plazo de 10 días para nombrar un sustituto del líder fallecido este miércoles si desea continuar en la disputa por la presidencia del país.
La fecha de la muerte de Campos coincide con la de su abuelo Miguel Arraes, antiguo dirigente del PSB, fallecido también el 13 de agosto, pero hace nueve años.

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