Asunción, 10 sep (PL) Violentos incidentes se registraron hoy aquí con saldo de numerosos heridos durante la protesta de miles de damnificados por las recientes inundaciones quienes rechazaron un intento de privatizar terrenos de las riberas del río Paraguay.
La multitudinaria marcha de los vecinos de esas zonas todavía en parte bajo las aguas impugnó una ordenanza de la Intendencia (alcaldía) que abriría las puertas a la entrega de esas áreas a una empresa española para construir allí un complejo inmobiliario.
Esa resolución, aprobada por mayoría gubernamental en la Junta Municipal e impulsada por el intendente, Arnaldo Samaniego, entregaría los terrenos sin costo a la entidad extranjera a cambio de asegurar contenes que impedirían más inundaciones y la construcción de numerosos edificios.
Ello conllevaría la retirada definitiva del lugar de más de 20 mil familias de humildes recursos en su gran mayoría, las cuales no sólo viven allí desde hace décadas sino que ganan el sustento con la pesca, pequeños negocios de alimentos y recolección de desechos sólidos para su posterior venta.
Los vecinos, albergados desde hace casi tres meses en endebles casas en distintas calles de zonas más altas de Asunción, también protestan porque serian afectados los estudios de sus hijos en las escuelas que funcionan allí.
La multitudinaria manifestación llegó hasta las puertas del edificio de la Intendencia reclamando entrevistarse con Samaniego, pero se encontraron con la ausencia del funcionario y una reunión de la Junta Municipal en la cual, presumiblemente, se ratificaría el proyecto privatizador.
Los ánimos se caldearon e intervino la policía antimotines, que lanzó gases lacrimógenos y disparó balines de goma y perdigones con el resultado de un número aún no confirmado de heridos y lesionados conducidos a los centros de salud más cercanos.
Los enfrentamientos duraron varias horas y la multitud rodeó totalmente el edificio sin permitir la salida de los concejales y enfrentaron con piedras a la policía, a la vez que destruyeron las puertas de cristal del edificio.
La Junta, aún en ausencia de Samaniego, acordó posponer indefinidamente la ordenanza en cuestión y acceder a una reunión mañana con los dirigentes de los damnificados a fin de encontrar una solución definitiva al diferendo.