Quito, 11 sep (PL) Un total de 15 países confirmaron su asistencia a la Feria Internacional del Libro Quito 2014, la cual tendrá como invitado de honor al Fondo de Cultura Económica de México, informaron hoy fuentes oficiales.
En rueda de prensa para presentar el evento, el ministro de Cultura, Francisco Velasco, manifestó que la cita, prevista del 21 de noviembre al 1 de diciembre, será una oportunidad para estrechar lazos entre México y Ecuador, dos naciones que ya tiene una profunda compenetración.
«Aquí están muy arraigados literatos mexicanos como Juan Rulfo, Octavio Paz, Carlos Fuentes o Sor Juana Inés de la Cruz, y también, por ejemplo, las rancheras de José Alfredo Jiménez», ilustró.
La subsecretaria de Emprendimientos Culturales, Daniela Fuentes, informó que desde el inicio en 2008 de estas ferias anuales la participación ha ido creciendo constantemente, y para este año esperan la asistencia de unas 150 mil personas, así como la presentación de un centenar de expositores.
Sobre las editoriales nacionales, explicó que además de las adscritas a la Cámara Ecuatoriana del Libro, otras editoriales alternativas que lo solicitaron tendrán su espacio.
Entre las actividades previstas habrá foros, paneles, charlas, conversatorios, homenajes a personalidades, jornadas profesionales, talleres, encuentros, además de conciertos, presentaciones escénicas y proyección de filmes nacionales e internacionales.
El presidente del Fondo de Cultura Económica de México, José Carreño, expresó que es un honor ser invitados especiales del evento literario, y mencionó que próximamente esta institución contará con una sede permanente en la capital ecuatoriana.
Agregó que el Fondo está apostando actualmente a una mejor circulación de libros en América Latina, pues es imprescindible «conocernos entre nosotros para hacer verdad la hermandad».
La editorial mexicana, próxima a cumplir 80 años de fundada, posee un catálogo cercano a los 10 mil títulos, y cuenta con nueve filiales en el extranjero y 35 librerías distribuidas dentro y fuera del país norteño.
Al abrir una sede en Quito, pondrá a disposición del público ecuatoriano un centro cultural, una librería, un centro distribuidor de libros y una editorial.