Washington, 12 sep (PL) El plan del presidente estadounidense Barack Obama contra el Estado Islámico (EI) está condenado al fracaso porque obvia la necesidad de emplear fuerzas terrestres, estiman hoy expertos citados por el diario The Washington Times.
Los golpes aéreos resultan insuficientes, porque es vital introducir al menos pequeñas unidades de operaciones especiales para aniquilar a los principales líderes de la organización yihadista en Iraq y Siria, añade el artículo.
El Pentágono necesita además emplear militares que cumplan misiones como indicadores de blancos para la aviación que actúa contra las agrupaciones del EI, agrega.
«Es una pérdida de tiempo, no hemos aprendido nada en los últimos 80 años sobre este tema, el poderío aéreo no va a cumplir por sí solo esta tarea, porque mientras no haya unidades terrestres en el terreno, el EI continuará su accionar», dijo al Times el exoficial de la CIA Larry Johnson.
Según Johnson, quien también trabajó como especialista en antiterrorismo para el Departamento de Estado, «los yihadistas se ajustan a las nuevas condiciones y se mezclan con la población civil, lo que dificulta la precisión de los ataques aéreos.
Los militantes del EI están tan dispersos entre los habitants de Mosul, Fallujah, Ramadi y otras ciudades iraquíes, que para eliminarlos es necesario emplear unidades que combatan cuadra por cuadra, acciones que son difíciles de ejecutar por las fuerzas de seguridad iraquíes por sí solas, dijeron otros expertos al Times.
De acuerdo con el artículo, un oficial del Ejército que trabaja en el Pentágono dijo, bajo la condición de mantenerse en el anonimato, que «el poderío aéreo por sí solo no gana ninguna guerra, y Obama ignoró en sus planes esta verdad ampliamente aceptada por los especialistas».
El militar añadió que con al menos un grupo reducido de tropas en el terreno podemos unirnos a los kurdos y los chiitas para apoyarlos y derrotar más fácilmente a las unidades del EI.
Por otra parte, el general retirado John Keane estima que «si la coalición dirigida por Estados Unidos lleva a cabo una fuerte campaña aérea sostenida contra objetivos en Iraq y Siria, el EI perderá libertad de movimiento, pero resulta inevitable realizar una contraofensiva terrestre para recuperar territorio».
Obama anunció el miércoles pasado que Estados Unidos incrementará los golpes aéreos contra los yihadistas en Iraq y realizará también bombardeos dentro de territorio sirio, acción percibida como un intento de la Casa Blanca en dirección al cambio de régimen que promueve contra el Gobierno de Damasco.
Desde el 8 de agosto pasado, la aviación militar norteamericana ha realizado unos 150 ataques aéreos contra agrupaciones del EI en suelo iraquí, donde además el Pentágono mantiene alrededor de mil 200 efectivos militares.