Washington, 13 sep (PL) Anualmente cerca de un millón 300 mil mujeres estadounidenses sufren ataques físicos en el hogar, según cifras a propósito hoy del vigésimo aniversario de una ley que protege a víctimas de violencia doméstica, abuso o tráfico sexual.
La Ley sobre la Violencia contra las Mujeres (VAWA, por su sigla en inglés) de 1994, fue impulsada por el actual vicepresidente Joseph Biden, cuando aún era senador por Delaware.
El presidente Barack Obama llamó esta semana a hombres y mujeres de todas las edades, líderes comunitarios y funcionarios en los distintos niveles del gobierno para trabajar juntos por poner fin a este tipo de castigo.
Según el mandatario esta ordenanza apareció en un momento en que muchos catalogaban el abuso doméstico como un asunto privado de familia, por lo tanto las víctimas eran relegadas a sufrir en silencio.
Obama admitió que pese a reportes de una disminución de estos casos en las pasadas dos décadas, queda trabajo porque aún «muchas mujeres continúan viviendo con miedo en sus propias casas y demasiadas víctimas saben lo que es el dolor del abuso».
En 2013 el Congreso sancionó una nueva versión de la legislación, que incluye por primera vez protecciones para las parejas del mismo sexo y miembros de tribus indígenas, así como mujeres indocumentadas, lo cual causó debate entre los republicanos.