Nuevo libro de Eusebio Ruvalcaba es un texto caprichoso

Por Huemanzin Rodríguez

Eusebio Ruvalcaba es un mexicano que escribe sobre Johannes Brahms en revistas, periódicos o suplementos culturales, dice tener una necesidad urgente de contagiar a la gente su pasión por Brahms. Así sea, por amor, música y amistad que ha publicado su nuevo libro: Amigos casi sólo de Brahms, editado por la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco y Ediciones Monte Carmelo.

“El título mismo se debe a un círculo de amigos que alguna vez tuve hace casi 40 años, y se llamaba así Amigos casi sólo de Brahms, que con el tiempo se pulverizó. Pero lo he evocado. Lo tengo colgado en mis paredes, lo tengo siempre cerca.” mencionó Eusebio Ruvalcaba.

El libro podría parecer caprichoso, pues lo mismo tiene relatos, poemas, reseñas musicales, anécdotas o reflexiones en torno a la figura y la obra de Hannes. Al leerlo no es tornadizo, su estructura es más que literaria, parece musical, con ideas que se desarrollan en diferentes momentos y ritmos. El escrito comienza con un recuerdo, Eusebio a los 16 años escucha a su padre, Higinio Ruvalcaba, tocar el violín junto a su madre, la tercera sonata para violín y piano de Brahms.

“Mi padre era gran admirador suyo, y mi madre también y tocaban juntos las sonatas para violín y piano de él, de tal manera que yo en el vientre de mi madre yo ya lo escuchaba. Seguramente esto tiene que ver con mi predilección por este enorme maestro”, señaló Ruvalcaba.

Ruvalcaba también hace un retrato del compositor desde diferentes ángulos y tiempos, cuenta cómo lo esperaba en Noruega Edvard Grieg, para comer en su casa. Y cómo Borges, aparentemente alejado de la música, le escribe un poema a Brahms. Dice que el compositor procura un gran alivio y obliga a la conciliación de la vida. Sus frases son tan profundas y tan hermosas que resultan una suerte de filosofía. Menciona que es lo opuesto de su otro ídolo, Beethoven.

Entre relato y poema, en el libro hay anotaciones musicales que además, recomiendan lo que el escritor considera una de las mejores grabaciones de la obra referida.

“Sus tres sonatas para violín y piano, creo que no tienen rival en la historia de la música de cámara. Ni siquiera las Diez de Beethoven son comparables. Podemos hablar también de su concierto para violín, el primer concierto de piano, su cuarta sinfonía. Y en general de su música de cámara. Sus sextetos para cuerdas son un prodigio de música” indicó el escritor.

Amigos casi sólo de Brahms es un libro muy cariñoso, no es para músicos o melómanos, simplemente es una invitación a dejarse acariciar por la obra de uno de los grandes compositores del siglo XIX. Eusebio Ruvalcaba ya trabaja en otro volumen dedicado a este compositor que lleve como título: Cartas a Brahms.

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